El Grupo de Política Monetaria (GPM) recomendó al Banco Central, en forma unánime, recortar la Tasa de Política Monetaria (TPM) en 75 puntos base en su reunión del viernes, y dejarla en 10,5%.
En específico, eso sí, “se recomienda explicitar que la magnitud de los próximos recortes de la TPM dependerá estrechamente de la trayectoria de cómo la inflación vaya convergiendo a la meta de 3%”.
Además, estableció que, “dado la incertidumbre en torno a la intensidad de la desaceleración de la actividad económica y la velocidad de la convergencia de la inflación a la meta de 3% hacia adelante, es necesario enfatizar que la magnitud de los futuros recortes en la TPM dependerá estrechamente de cómo los datos macroeconómicos afectarán las perspectivas en torno a la trayectoria de la actividad, demanda e inflación”.
Sobre los factores a considerar para su recomendación, el GPM evaluó que en Chile el dinamismo de la actividad y demanda sigue bastante debilitado tras las cifras del Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) de mayo.
Respecto de la inflación, planteó que «tanto en Chile como en otros países, la inflación subyacente sigue siendo elevada y se ha mostrado relativamente más persistente de lo previsto. Con ello, es necesario monitorear con cautela si la tendencia inflacionaria de mediano plazo seguirá la trayectoria anticipada por las expectativas de mercado”.
El GPM también advirtió que “el ambiente e incertidumbre política ha vuelto a deteriorarse, lo que podría impactar la dinámica del tipo de cambio y la inflación”.