La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, llegó a Montevideo este jueves 5 de diciembre con el objetivo de culminar las negociaciones hacia un acuerdo comercial entre la Unión Europea (UE) y el Mercosur, enfrentándose a la oposición de países como Francia e Italia.
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Von der Leyen expresó optimismo en la red social X: «Aterrizamos en América Latina. La meta del acuerdo UE-Mercosur ya está a la vista. Trabajemos, crucemos la meta. Tenemos la oportunidad de crear un mercado de 700 millones de personas».
Sin embargo, este entusiasmo contrasta con la postura de París y Roma. El presidente francés, Emmanuel Macron, calificó el proyecto de acuerdo como «inaceptable en su estado actual», mientras que Italia declaró que «no se dan las condiciones» para avanzar, subrayando la necesidad de proteger al sector agrícola.
En Montevideo, la presidenta de la Comisión Europea sostuvo una reunión «muy positiva» con el presidente uruguayo, Luis Lacalle Pou.
Según el canciller uruguayo Omar Paganini, solo restan «detalles mínimos» para alcanzar un texto consensuado. Los presidentes de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay, junto con Von der Leyen, ofrecerán una conferencia de prensa conjunta este viernes a las 09:30 horas locales (12:30 GMT).
25 AÑOS DE NEGOCIACIONES
El acuerdo comercial entre la UE y el Mercosur lleva casi 25 años en discusión.
Aunque ambas partes anunciaron un pacto inicial en 2019, el proceso quedó estancado.
Según fuentes consultadas por la AFP, se ha avanzado en un acuerdo técnico con actualizaciones en varios capítulos en los últimos años.
España, Alemania y otros países europeos están presionando para concluir las negociaciones antes de la toma de posesión de Donald Trump como presidente de Estados Unidos, quien ha prometido aumentar aranceles aduaneros.
Europa busca exportar más vehículos, maquinaria y medicamentos al Mercosur, mientras que este último aspira a colocar más productos agrícolas como soja, carne y miel en el mercado europeo.
No obstante, sectores agropecuarios europeos rechazan el acuerdo por temor a competir en condiciones desfavorables, y ONG ambientalistas denuncian que el pacto podría acelerar la deforestación en la Amazonia y agravar la crisis climática.
UN ACUERDO AÚN INCIERTO
Aunque la voluntad de cerrar el acuerdo es clara, no hay garantías de que este sea ratificado. La Comisión Europea necesita la aprobación de al menos 15 países miembros que representen el 65% de la población de la UE, además del respaldo del Parlamento Europeo. Francia, Italia, Polonia, Austria y Países Bajos mantienen posturas críticas al acuerdo.
En el caso del Mercosur, cada país deberá ratificar el texto de manera independiente para que entre en vigor.
Por su parte, el presidente brasileño Luiz Inácio Lula da Silva espera que el acuerdo fortalezca la posición del Mercosur y alivie tensiones internas, particularmente frente a las posturas más liberales de líderes como el presidente argentino Javier Milei.
La cumbre de Montevideo, además de abordar este trascendental acuerdo, marcará la bienvenida de Panamá como miembro asociado del Mercosur, junto a la participación de los Estados asociados Chile y Colombia.
[ES] En el marco de la LXV Reunión Ordinaria del Consejo de Mercado Común (CMC) y Cumbre de Jefes de Estados del MERCOSUR y Estados Asociados, se realizó en Montevideo la Reunión Ordinaria de Ministros de Economía y Presidentes de Bancos Centrales (RMEPBC) 📊🪙
Las delegaciones… pic.twitter.com/QTYLCuwKLE
— MERCOSUR (@mercosur) December 6, 2024