Una violenta jornada, quizás la peor del mes, se vivió ayer en la Franja de Gaza. De acuerdo con la agencia Wafa, hubo 111 muertos.
La mayoría de ellos -72- perdieron la vida en un bombardeo israelí a edificios en Beit Lahia, localidad ubicada en el norte que permanece asediada desde hace seis semanas.
Según Wafa, ayer Israel atacó la localidad hasta en diez ocasiones.
La última fue anoche y aún no se han identificado víctimas.
En el sur, un ataque contra la «zona humanitaria» donde está la mayoría de los desplazados de Gaza (el 90% de la población en estos momentos) mató a un matrimonio y sus dos hijos, e hirió de gravedad a otra hija de la pareja.
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Israel estableció parte del suroeste de Gaza, a lo largo de las costas de Al Mawasi, Jan Yunis y Deir al Balah, como una «zona segura» para los casi dos millones de desplazados a causa de su ofensiva. Sin embargo, esta ha sido objeto de múltiples ataques a lo largo del año.
Más de 43 mil 800 personas han muerto en la Franja de Gaza y más de 103 mil han resultado heridos desde que Israel lanzó su ofensiva en octubre de 2023 a raíz de los ataques de Hamás contra territorio israelí.
Ahí murieron mil 200 personas.
BEIT LAHIA
Beit Lahia ha sido el escenario de dos de los bombardeos con más víctimas de la guerra en el último mes.
El pasado 29 de octubre, en una nueva violenta jornada en Gaza, otro ataque aéreo contra un edificio de cinco pisos mató a 93 gazatíes, según las cifras de las autoridades sanitarias.
El día 20, otro bombardeo que según las fuerzas armadas era «de precisión» mató en Beit Lahia a otras 73 personas.
Desde hace más de seis semanas, el Ejército mantiene un cerco militar en el norte. Este ha causado más de dos mil víctimas fatales según las estimaciones del Gobierno de la Franja de Gaza.
Ha empeorado drásticamente las ya deficientes condiciones en las que vivía su población, pues limitó a niveles mínimos el acceso de ayuda humanitaria a la región.
Además, el Ejército ha asediado y atacado los tres hospitales activos del norte: el Kamal Adwan, el Al Awda y el Indonesio. Este último debió cesar su actividad.