A un «cambio morfológico» en la realidad delictual chilena atribuye el exsenador Felipe Harboe el aumento de las denuncias por secuestro en el país.
«Chile debe acomodar su institucionalidad pública, es decir, la oferta del Estado, a la nueva realidad criminal. Chile ha tenido un cambio morfológico desde el punto de vista criminal. Hemos pasado del delito habitual, del delito común, la delincuencia, a la existencia de crimen organizado, donde hay mayores niveles de violencia», analizó en entrevista con Cooperativa.
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«Se han hecho esfuerzos importantes y ha habido resultados, pero son insuficientes (…) Pretender tener resultados positivos aplicando las mismas técnicas que se utilizaban para persecución del delito común, me parece que no es posible», recalcó.
«CAPACITAR A LAS AUTORIDADES POLÍTICAS»
«Entre 2021 y 2022 subió un 77 por ciento el número de denuncias de secuestro, que probablemente no son tan conocidas, pero cuando estamos hablando de más de 800 denuncias en un año es un hecho preocupante, porque ya no es un hecho aislado, sino que se trata de ciertas conductas crecientes, entonces ahí se requiere una investigación mucho más focalizada», especificó Harboe.
«Respecto del pago o no de rescate, esto es un debate que existe no solo en Chile, también en diferentes lugares donde en algún momento el secuestro fue un tema más común», añadió.
Para el exsubsecretario, «también es importante capacitar a las autoridades políticas».
«Porque una cosa es que le informen de las gestiones que realizan las policías o el Ministerio Público como un elemento clave que se trata como conductor de las políticas de seguridad, y otra cosa es que las autoridades políticas comiencen a dar detalles de la investigación o de la forma de resolverla (…)».
Con eso, enfatizó, «se genera una normalización de ese tipo de delitos y también genera una imitación».







