Chile es un país sísmico, qué duda cabe. Quizás el movimiento telúrico que provoca este delicioso trago local, dio lugar a su nombre.
El “Terremoto” evoca a uno de los fenómenos naturales más característicos de Chile, pero también es el nombre de uno de los tragos más populares durante las Fiestas Patrias.
Imperdible en esta tradicionales y populares fiestas, es también demandado casi todo el año.
Los hay en pipeño y en vino tinto (a este último lo denominan «El Africano»), pero más allá del toque que usted pueda colocarle a este refrescante trago, en ciertos locales este es la especialidad de la casa.
Un poco de historia
Desde luego, como todo lo que nace del folclore, no tiene un padre y madre definidos, pero, de boca en boca se va estableciendo una historia que se ha hecho más o menos creíble.
Según los habitué de El Hoyo, la tradicional picada de calle Gorbea, su origen se encontraría en ese local.
Los dueños han relatado a diversos medios (y con orgullo) que, de manera accidental a mediados de los años 80, nació la ahora tradicional bebida.
Según el sitio guíaquehacer, un trabajador histórico de ese establecimiento, Enrique Marambio, fue Guillermo Valenzuela de la tercera generación de dueños del bar/restaurante criollo, quien «inventó» el trago.
Ello, cuando unos reporteros alemanes llegaron a Santiago a cubrir los daños del terremoto de 1985.
Según el relato de Marambio, los mentados periodistas entraron a El Hoyo a tomar pipeño, pero lo encontraron tibio.
Entonces, la «chispeza» de Valenzuela, no encontró nada mejor que echarle a la bebida un poco de helado de piña.
Puedes leer también: Panoramas «sanos» en Fiestas Patrias
Los periodistas no podían creer la delicia criolla que degustaban. Desde ese momento, el «Terremoto» se hizo parte de la carta del lugar.
El pipeño, cuenta la historia, proviene de la zona de Cauquenes.
Los precios varían pero quienes lo conocen, aseguran que bien vale su precio. Claro, se sirve en un vaso grande lo que lo hace «dulce pero cabezón».
Se recomienda no tomarlo con el estómago vacío, porque de seguro, sabrá cómo entró al local, pero no cómo llegó a casa, si es que llega.
Y qué mejor que una apetecida “pichanga”, con queso fresco, aceitunas, huevo, arrollado, pernil, lengua y malaya.
También un trozo de pierna de cerdo, sea para picar o bien en sandwich (ideal de marraqueta) acompañada de tomate, ají y mayonesa.
Ahora, lo puede acompañar de una tabla de quesos, camarones o variedad de embutidos.
Siguiendo la ruta del Terremoto
Según los conocedores del trago cada vez más popular, los locales más buscados para degustarlo, son desde luego, El Hoyo, el Ciro’s de Av. Isidora Goyenechea, en pleno barrio El Golf (porque para mala suerte en el centro no hay).
Otro local muy recomendado es Las Tejas. El actor y músico Daniel Muñoz lo llegó a llamar “el palacio del terremoto”.
Claro, usted dirá que nos olvidamos de la tradicional «Piojera«. Por supuesto que no, ya que su preparación nada tiene que envidiarle a los más reputados lugares en que el «Terremoto» se ha convertido en una bebida de culto.
¿Recetas? Hay muchas pero pareciera que esta es la más tradicional
Desde luego, no puede faltar el vino Pipeño, vino joven, muy típico de la zona central de Chile, también la granadina , un jarabe rojo brillante y dulce y, por supuesto el helado de piña, que le dio su toque especial y le otorga una textura cremosa y un sabor inconfundible.
Un vaso que, a lo menos, debe ser de medio litro, para que no se note pobreza.
- Colocar 3 cucharadas grandes de helado de piña en el vaso.
- Añadir el Pipeño a gusto.
- Dos cucharadas de granadina sobre el helado le darán ese toque de color y dulzura.
Luego solo tiene que revolver y disfrutar. Ojo, que con responsabilidad, pues su sabor dulce es bastante engañoso.
Hay quienes reemplazan el pipeño por vino blanco o espumante. Otros cambian la granadina por Fernet, para darle un sabor más seco y más amargo. Usted, no lo haga.
PD: Si usted tiene otra receta o conoce otra picada, no sea mezquino y compártalas…
Ah… y para que vea si hace o no referencia al movimiento telúrico, solo mire el video.
