Las cosas no han estado del todo bien para el presidente de Renovación Nacional (RN) y senador, Rodrigo Galilea. La fallida acusación constitucional contra el Presidente Gabriel Boric y la ‘libertad de acción’ a sus militantes que llevó a la renuncia del secretario comunal de RN en Vitacura, deja en evidencia el desorden al interior del partido.
El lunes la bancada de diputados de RN, liderada por Ximena Ossandón, hicieron un punto de prensa en el Congreso Nacional anunciaban con orgullo que apoyaban la acusación constitucional contra la ministra del Interior, Carolina Tohá. En el mismo discurso, señalaron que, además, crearían una contra Boric, todo esto en respuesta a la crisis de seguridad que atraviesa el país.
“Parece que el presidente de la República está cuidando la paz de su coalición por encima de la vida y la integridad de todos los chilenos y chilenas. No podemos hacernos los desentendidos ante esta realidad. Por eso, vamos a acusar constitucionalmente al presidente”, declaraba Ossandón.
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Lo anunciado por los parlamentarios de RN pilló desprevenidos a todos, incluso al presidente del partido, Rodrigo Galilea, que rápidamente subió un video argumentando que «hemos hecho un llamado a nuestros diputados para que reconsideren esta situación».
Aunque, de acuerdo a lo que señalan las voces internas del conglomerado, la diputado acogió esta idea de acusar al Mandatario, debido a la conmoción de los vecinos del distrito 12 por la reciente balacera en Bajos de Mena, que derivó a la persecución e intimidación del personal del Cesfam Raúl Silva Henríquez.
Al día siguiente del bombazo, y sin conseguir apoyos ni siquiera en Chile Vamos, Galilea se reunió con los diputados adherentes de la idea y, finalmente, puso paños fríos a la situación.
«Habiendo hecho todos los análisis que corresponden en esta reunión, hemos llegado a la conclusión y a la convicción de que Renovación Nacional le dará un espacio una vez más al diálogo. Existen todas las condiciones jurídicas para eventualmente acusar al Presidente de la República, pero RN apostará por la conversación». Argumentó el senador por el Maule.
«La libertad de acción»
Con toda la prensa mencionando lo ocurrido en el Congreso, los traspiés iban a continuar para el senador.
El miércoles, Evópoli anunciaba que daba «libertad de acción» a sus militantes en Las Condes, quitándole piso a la candidatura de la cuestionada Marcela Cubillos, carta de Chile Vamos en la comuna. Unas horas más tardes, RN daba la noticia que haría lo mismo, pero con Camila Merino (Evópoli) en Vitacura.
Para la directiva distrital de Renovación Nacional en Las Condes, Vitacura y Lo Barnechea, Evópoli no respetó el acuerdo de apoyos en Las Condes, y acordaron que los adherentes podían apoyar a cualquier candidato a alcalde en Vitacura «y no exclusivamente» a Merino.
Sin embargo, esta medida tampoco gustó a Galilea, teniendo que volver a desacreditar otra iniciativa de militantes en menos de una semana. «La candidata de Chile Vamos en la comuna de Vitacura es Camila Merino. Esa es una decisión del consejo general del partido y que además es una decisión que mantenemos de manera absoluta en la directiva», aseveró, relevando que «las directivas distritales no tienen la autorización para definir ni libertades de acción».
Bajo lo mismo, también le dedicó palabras a Cubillos, expresa que ella «es la candidata más apropiada para dirigir la comuna de Las Condes y por lo tanto mantenemos totalmente nuestro compromiso a apoyarla».
La renuncia de un dirigente
Arnau Sarra, secretario comunal de Renovación Nacional en Vitacura, al conocer las palabras de su presidente, renunció y acusó que toma la decisión debido a «acontecimientos que han demostrado una falta de respeto a quienes integramos esta Directiva Comunal».
Agrega. «Renuncio motivado por la pérdida de la confianza, por seguir un camino que parece responder a intereses personales y políticos que no reflejan los compromisos que hemos adquirido».
Ahora bien, las quejas contra Galilea al interior de RN no son casos aislados. De acuerdo militantes del partido, el estilo de «llevar las aguas en paz» con el Gobierno –que fue lo que llevó a que desactivaran rápidamente la AC contra Boric–, incomoda a los sectores más duros del conglomerado y de Chile Vamos.
En menos de una semana el presidente de RN, Rodrigo Galilea, apaciguó las aguas ante una AC contra el Presidente y enfrentó la renuncia de uno de sus dirigentes.
