Hoy, jueves 14 de noviembre se conmemora el Día Mundial de la Diabetes. Una fecha fundamental para informar y prevenir esta enfermedad.
En Chile, más de 2 millones de personas padecen diabetes. Esto, representa alrededor del 12,3% de la población, según datos recientes de la Encuesta Nacional de Salud.
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La cifra posiciona a Chile como uno de los países con mayor prevalencia de esta enfermedad en Sudamérica, una situación impulsada en gran medida por factores de riesgo como la obesidad y el sedentarismo.
La Diabetes
Esta enfermedad se caracteriza por generar niveles elevados de glucosa (azúcar) en la sangre, lo que impide que el cuerpo la metabolice adecuadamente.
Este proceso es importante tanto para la obtención de energía como para la eliminación de sustancias tóxicas en el organismo.
Tipos de diabetes
Según la Organización Mundial de la Salud existen tres tipos de diabetes:
Diabetes tipo 1: Una afección en la cual el sistema inmunitario del cuerpo ataca por error las células del páncreas que producen insulina.
Este tipo suele diagnosticarse en personas jóvenes, aunque también puede presentarse a cualquier edad, y requiere la administración diaria de insulina para que el organismo funcione correctamente.
Diabetes tipo 2: Este es el tipo más común de diabetes y está vinculado a factores de estilo de vida como el sobrepeso y la inactividad.
Las personas con diabetes tipo 2 tienen dificultades para producir suficiente insulina o para utilizarla de manera efectiva, lo que resulta en altos niveles de glucosa en sangre.
Aunque tradicionalmente se diagnostica en adultos, la incidencia está aumentando entre los jóvenes.
Diabetes gestacional: Este tipo se desarrolla durante el embarazo y suele desaparecer después del parto. Sin embargo, las mujeres con diabetes gestacional y sus hijos enfrentan un riesgo más alto de desarrollar diabetes tipo 2 en el futuro.
Síntomas comunes
Aumento de la sed y la micción frecuente: Los niveles altos de glucosa en la sangre provocan que los riñones eliminen más agua y como consecuencia lleva a una mayor necesidad de orinar y sed constante.
Fatiga: La falta de insulina impide que las células obtengan la energía necesaria.
Pérdida de peso inexplicada: Especialmente común en la diabetes tipo 1, ya que el cuerpo comienza a quemar grasa y músculo para obtener energía al no poder usar la glucosa correctamente.
Visión borrosa: Los niveles altos de glucosa pueden afectar la visión al cambiar el líquido en los ojos.
Cicatrización lenta de heridas: La diabetes dificulta el proceso de cicatrización y aumenta el riesgo de infecciones.
Infecciones frecuentes: La diabetes debilita el sistema inmunitario, aumentando la vulnerabilidad a infecciones, especialmente en la piel, encías y vejiga.