Mal les fue a Camila Polizzi y su expareja Sebastián Polanco en su intención de cambiar las medidas cautelares a las que están sometidos tras ser imputados por la arista Lencería del Caso Convenios. Tras su formalización, hace aproximadamente un año, cumplen con arresto domiciliario total.
Sus defensas habían solicitado al tribunal que se dictaran cautelares menos gravosas, pero finalmente el Juzgado de Garantía de Concepción determinó que sigan bajo arresto domiciliario total.
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Camila Polizzi, previa autorización, se presentó en la audiencia de hoy de manera telemática.
Sebastián Polanco, en cambio, asistió al tribunal.
Ambos son indagados en relación con convenios presuntamente fraudulentos entre la Fundación En Ti y y el Gobierno Regional del Biobío.
Los delitos son estafa, falsificación de documento oficial, usurpación de identidad y lavado de activos.
EL CASO LENCERÍA
Al caso se le conoce como caso Lencería, porque para justificar transferencias se presentaron boletas por compras de ropa interior, prendas de prestigiosas marcas, cenas en restaurantes y comprobantes de delivery.
La indagatoria por la cual Camila Polizzi y Sebastián Polanco están con cautelares se remonta a julio de 2023.
Según la investigación de la Unidad de Alta Complejidad de la Fiscalía Regional del Biobío, Polizzi y Polanco se apropiaron de la Fundación En Ti para obtener, vía asignación directa, recursos por $250 millones desde el GORE.
Desde ahí simularon la ejecución de los proyectos asociados a los contratos de proyecto de mejoramiento barrial de la zona norte de Concepción.
Para acceder a los fondos la pareja habría ofrecido al presidente de la fundación, Gerardo Silva, el pago de $10 millones como “arriendo” de la ONG.
«FUE UN ERROR»
Tras conocerse el dictamen de hoy del Juzgado de Garantía de Concepción Sebastián Polanco se refirió a su detención del miércoles tras ser sorprendido trabajando en un centro comercial. Ello, pese a estar con arresto domiciliario.
«Sí, fue un error, pero en la desesperación… Vivo con mi mamá solamente; ella tiene una compensación económica de 100 mil pesos y tengo que colaborar en la casa. Yo me equivoqué, fui a trabajar y eso fue un error», reconoció.