El Gran Premio de Las Vegas 2024 fue escenario de grandes emociones para Red Bull, con Max Verstappen coronándose tetracampeón de la Fórmula 1 a sus 26 años, y Sergio «Checo» Pérez destacando con una brillante estrategia de neumáticos que lo llevó a sumar puntos importantes .
VERSTAPPEN: TETRACAMPEÓN CON RESILIENCIA
A pesar de una temporada complicada para Red Bull, con un RB19 que mostró fallas mecánicas más frecuentes que en años anteriores, Verstappen logró asegurar su cuarto título mundial.
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Aunque terminó quinto en la carrera, el neerlandés supo administrar su ventaja en puntos y se aseguró la corona antes de que concluya la temporada.
El Gran Premio fue dominado por Mercedes, con un sólido 1-2 liderado por George Russell y Lewis Hamilton.
Sin embargo, la actuación de Verstappen en el campeonato refleja su capacidad para superar adversidades, consolidándolo como uno de los grandes de la historia de la F1.
CHECO PÉREZ: UNA LECCIÓN DE ESTRATEGIA
Por su parte, Sergio Pérez ofreció una clase magistral de manejo de neumáticos. Comenzando desde el puesto 15 en la parrilla, el piloto mexicano apostó por una estrategia inicial con neumáticos duros, lo que le permitió avanzar posiciones de manera constante. Posteriormente, en su primera parada, utilizó medios neumáticos que habían complicado a otros pilotos, pero que Pérez supo gestionar con maestría.
El mexicano logró escalar hasta la décima posición, sumando puntos valiosos y demostrando una vez más su talento en la gestión estratégica.
El doble avance de Sergio Pérez a Kevin Magnussen y Liam Lawson en las últimas vueltas destacó como uno de los mejores momentos de la carrera.
UNA TEMPORADA HISTÓRICA
La temporada 2024 quedará marcada por los retos que enfrentó Red Bull, así como por las actuaciones memorables de sus pilotos. Verstappen, ahora tetracampeón, se acerca al récord histórico de títulos de Lewis Hamilton, mientras que Checo Pérez continúa consolidándose como uno de los pilotos más consistentes en el manejo de estrategias y recuperación en pista.
El Gran Premio de Las Vegas no solo fue un espectáculo, sino un recordatorio del talento y la resiliencia que definen a los grandes del automovilismo.