Donald Trump, presidente electo de Estados Unidos, advirtió al movimiento islamista Hamás que si antes de que él asuma el poder en enero próximo no libera a todos los rehenes que capturó hace más de un año en Israel, “habrá un infierno que pagar” en Oriente Medio.
Sus palabras exactas, posteadas a través de su propia red social, llamada Truth Social, fueron: “Si los rehenes no son liberados antes del 20 de enero de 2025, fecha en la que asumo con orgullo el cargo de presidente de Estados Unidos, habrá TODO UN INFIERNO que pagar en Oriente Medio y para aquellos responsables que perpetraron estas atrocidades contra la humanidad”.
De paso, criticó que “todo sean palabras”. También, que no haya “nada de acción” para liberar a los rehenes que fueron retenidos de forma “tan violenta, inhumana y contra la voluntad de todo el mundo”.
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“Aquellos responsables lo pagarán con una dureza nunca vista en la larga historia de Estados Unidos”, recalcó el presidente electo.
ALREDEDOR DE CIEN PERSONAS
Ayer Hamás informó que más de una treintena de los casi 250 rehenes a lo que hizo referencia Trump y que fueron secuestrados durante los ataques del 7 de octubre de 2023, murieron a causa de los ataques ejecutados por las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI). Estas, al día siguiente de la ofensiva, iniciaron una cruenta campaña militar en la zona de Gaza.
Se estima en alrededor de un centenar las personas que siguen secuestradas bajo custodia de Hamás. Estarían escondidas en túneles bajo tierra en Gaza.
Sin embargo, las autoridades israelíes no se aventuran a detallar si podrían estar vivos o muertos.
Por lo pronto, las familias de los rehenes siguen presionando al Gobierno para que alcance un acuerdo en el enclave palestino. Este tendría que incluir la liberación de los rehenes.
