Hace tres días, precisamente el martes 17 de diciembre, el Gobierno de Javier Milei en Argentina anunció el término de actividades de Trenes Argentinos Capital Humano (Decahf), una importante empresa de ferrocarriles del Estado.
«A partir de ahora, Trenes Capital Humano no realizará contrataciones ni facturaciones y, en los aspectos puntualmente económicos, no tendrá egresos ni tampoco ingresos. Además, al darse de baja la empresa, no contará con personal ni realizará ninguna actividad», comunicó la Secretaría de Transporte trasandina.
Esta decisión se enmarca en el «Plan de Ajuste y Optimización de Recursos» que ha liderado la administración del mandatario libertario. En octubre ya había anunciado el cese de casi 1.400 trabajadores.
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Justamente el Gobierno consideró a la empresa como un organismo sin funciones relevantes para justificar su existencia, según recogió Infobae.
Desde la Casa Rosada aseguraron que el cierre de este organismo equivaldrá a un ahorro anual de 41 millones de dólares para el Estado. Esto se logrará con el término de contratos para 1.388 trabajadores, junto con la eliminación de 23 cargos jerárquicos.
Anteriormente el secretario de Transporte, Franco Mogetta, había dicho que la empresa estatal funcionaba para «despilfarrar recursos públicos» y que habían acumulado gastos que no guardaban relación con su objetivo, como eventos artísticos y contrataciones.
En ese sentido, las actuales autoridades afirmaron que «Trenes Argentinos Capital Humano demandó 180 millones de dólares al Tesoro Nacional».
Asimismo, dijeron que el organismo duplicaba tareas que ya son realizadas por otras empresas ferroviarias en Argentina. Aseguran que deben optimizar recursos y reducir sus gastos fiscales, como ha sido la política tónica desde la asunción de Javier Milei hace ya un año.
