El gobierno de Ucrania confirmó un ataque contra un depósito de combustible en territorio ruso, señalado como un punto clave para el suministro de bombarderos estratégicos.
Según el Ministerio de Defensa ucraniano, la acción debilitó la capacidad operativa de la aviación rusa, que se usa para llevar a cabo bombardeos en territorio ucraniano.
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En tanto, imágenes difundidas mostraron enormes llamas y columnas de humo que permanecieron visibles durante horas.
El gobernador regional de Saratov, Roman Busargin, confirmó un ataque «masivo» con drones en la región durante la noche, señalando que causó daños en un sitio industrial.
Mientras tanto, el Ministerio de Defensa de Rusia informó que sus defensas aéreas interceptaron 23 drones ucranianos, aunque varios lograron evadir el sistema y causar explosiones en el área.
Este incidente subraya el uso intensivo de drones de largo alcance en el conflicto, un componente clave en la estrategia ucraniana para interrumpir la logística rusa.
