La Contraloría confirmó que no se encontraron irregularidades en la adquisición del fundo El Nudo por parte de la Conadi, operación en la que se desembolsaron más de 10 mil millones de pesos con el objetivo de transferir el terreno a una comunidad mapuche.
Por otro lado, diversos parlamentarios criticaron al organismo, argumentando que la normativa vigente prohíbe la compra de predios “violentados” o “perturbados”.
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En este contexto, cinco diputados de La Araucanía solicitaron explicaciones sobre esta controvertida transacción, considerando que el fundo tiene un historial de reivindicaciones territoriales por parte de la comunidad mapuche de Trapilhue, ubicada en Freire.
LEY DE PRESUPUESTOS
A pesar de que la Ley de Presupuestos establece que no se pueden adquirir terrenos en condiciones de “perturbación” o “violencia”, la compra fue concretada.
En relación a esto, el diputado Andrés Jouannet, del partido Amarillos, expresó que la operación «está mal hecha desde su origen».
Asimismo, anunció que sostendrá una reunión con la contralora, Dorothy Pérez, para abordar este tema y analizar cómo se llevó a cabo la transacción.
COMPRA DE FUNDO
Por su parte, la diputada Gloria Naveillán afirmó que la compra del fundo “El Nudo” se realizó gracias a un documento firmado por los propietarios, en el que se aseguraba que el terreno no estaba perturbado.
Según Naveillán, este tipo de maniobras sería un mecanismo utilizado por la Conadi para llevar adelante adquisiciones como esta.
En un comunicado, Conadi destacó que “en cuanto a eventuales perturbaciones del fundo, el ente contralor señala que estas fueron desmentidas por los mismos propietarios del predio a través de una declaración jurada, lo que fue reafirmado con una visita predial realizada por funcionarios de Conadi, comprobando in situ que no existía ninguna forma de presión o perturbación sobre el inmueble”.