La decisión de un hombre de Valdivia de sumarse a la huelga de hambre de los damnificados del megaincendio de Valparaíso ha generado controversia, ya que no sufrió daños ni estuvo en la zona durante la tragedia.
Lea también Empresas de telecomunicaciones exigirán verificación biométrica
LLEGÓ COMO VOLUNTARIO, PERO SE CONVIRTIÓ EN LÍDER DE LA PROTESTA.
Víctor Luciano Quintana Ferreira, de 43 años, reconoció en una entrevista con Puranoticia que reside en la región de Los Ríos y que llegó a Valparaíso después del desastre como parte de un voluntariado. Sin embargo, con el tiempo, su involucramiento creció hasta convertirse en una de las voces más visibles de la protesta, en la que se denuncia la falta de ayuda a los afectados por el incendio ocurrido hace un año.
“No soy damnificado, soy de la región de Los Ríos, de la ciudad de Valdivia. Esto comenzó como un voluntariado y, finalmente, me involucré tanto que ya llevo un año con todos los vecinos. Hoy por hoy, soy el presidente de la Agrupación de Víctimas del Atentado en Chile del 2 y 3 de febrero”, declaró Quintana.
El activista aseguró que no busca obtener beneficios del Estado ni financiamiento, destacando que su participación en la huelga responde exclusivamente a motivos solidarios.
UN ACTIVISTA CON HISTORIAL POLÍTICO
Aunque algunos defienden su presencia en la protesta como un acto de solidaridad, su historial político despierta sospechas sobre sus verdaderas intenciones. Quintana ha criticado abiertamente al Gobierno de Gabriel Boric y ha expresado públicamente su apoyo a José Antonio Kast.
Además, en redes sociales ha compartido imágenes en las que se le ve con una copa con la imagen de Augusto Pinochet, lo que ha provocado polémica entre los manifestantes y la opinión pública.
Quintana, ex coordinador del partido político “Unidos”, insiste en que su participación en la huelga de hambre responde a un compromiso personal y no a una estrategia para obtener beneficios materiales. Sin embargo, su activismo político ha puesto en duda la genuinidad de su papel dentro de la protesta.