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Sin cárcel: Luis Rubiales condenado por agresión sexual a Jenni Hermoso

Por Allan Santander

Periodista

Rubiales Hermoso
Luis Rubiales, ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol (Foto: EFE)
Luis Rubiales, expresidente de la RFEF, ha sido condenado a una multa de 18 meses y una orden de alejamiento tras el beso no consentido a Jenni Hermoso en el Mundial 2023.

No hay cárcel para Rubiales. El Juzgado Central de lo Penal de la Audiencia Nacional dictó su veredicto sobre el caso de Luis Rubiales, expresidente de la Real Federación Española de Fútbol, por el beso no consentido que le dio a Jennifer Hermoso durante la ceremonia de entrega de medallas en la final del Mundial femenino de fútbol 2023.

El tribunal ha condenado a Rubiales a 18 meses de multa, con una cuota de 20 euros al día, es decir, unos 10.800 euros en total. A su vez, se le impuso una orden de alejamiento de 200 metros de la jugadora, prohibiéndole también cualquier tipo de comunicación durante un año.

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EXONERADO DEL DELITO DE COACCIONES

A pesar de que la Fiscalía había solicitado una condena de 2 años y 6 meses de cárcel para Rubiales, de los cuales un año correspondía al delito de agresión sexual y 18 meses al de coacciones, el juez José Manuel Fernández-Prieto no encontró suficientes pruebas para condenar a Rubiales ni a los otros tres implicados en el caso por coacciones.

Es por ello que Jorge Vilda (exseleccionador femenino), Albert Luque (exdirector de Fútbol masculino) y Rubén Rivera (exresponsable de marketing de la RFEF) fueron absueltos de esos cargos. Aunque habían sido acusados de presionar a Hermoso tras el incidente.

UN JUICIO MEDIÁTICO

El juicio, que atrajo la atención mundial, se centró en el comportamiento de Rubiales durante la ceremonia posterior a la victoria de la selección española en el Mundial femenino, cuando besó a Hermoso sin su consentimiento.

La jugadora, en su declaración, afirmó que Rubiales le había «agarrado la cabeza con las manos y me besó sin preguntarme, no pude reaccionar».

Ante el tribunal, Rubiales defendió su postura, asegurando que antes del beso le pidió permiso a Hermoso. Una versión que no logró convencer al juez, quien consideró que no hubo consentimiento por parte de la futbolista.

¿UN VEREDICTO HISTÓRICO?

Este fallo marca un hito en el ámbito deportivo. Pone de manifiesto la creciente atención que se está prestando a los casos de acoso y abuso sexual en el deporte. Una problemática que ha cobrado relevancia en los últimos años.

Aunque Rubiales ha evitado la cárcel, su condena económica y la orden de alejamiento subrayan la gravedad del delito cometido. El veredicto puede ser recurrido por las partes implicadas ante la Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional. Dejando abierta la posibilidad de futuras apelaciones.

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