El martes, en una entrevista con Vía X, el formalizado exalcalde de Recoleta Daniel Jadue se mostró dispuesto a ser nuevamente candidato presidencial,, candidatura que aún nadie le ha ofrecido, y despertó las alarmas entre los partidos del oficialismo.
Ya la idea hacía ruido cuando la opción parecía lejana; tanto por su situación judicial por el caso Farmacias Populares como por sus críticas al Presidente Gabriel Boric y al Frente Amplio.
Ahora, tras su planteamiento, de acuerdo con La Segunda, su presencia pone piedras al camino de unidad que ha demandado Michelle Bachelet al progresismo aún antes de definir si aceptará ser la abanderada de la centro izquierda.
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Según fuentes del medio citado un integrante de la directiva PS comentó que para aceptar que el exjefe comunal esté en la papeleta “depende de quienes apoyen a quienes, pero trataremos al máximo de evitarlo”.
Un parlamentario advirtió que debería “salir de su situación judicial en principio”.
Paulina Vodanovic, presidenta de la colectividad aseveró que “cada partido define a sus candidatos. Primero tenemos que escuchar la posición del PC. No podemos vetar, pero sí hacer algún énfasis en esa discusión”.
Otros socialistas plantearon que la presencia de Jadue podría atraer a la primaria a un electorado más duro que, por ejemplo la ministra Jeannette Jara, la otra opción PC.
«A NADIE LE AGRADA»
Donde son más tajantes en en el Frente Amplio.
Algunos dirigentes descartan aceptarlo en una primaria y afirman que debería primar la doctrina Tohá que se aplicó para remover a autoridades con temas judiciales pendientes y que ya en la negociación municipal la formalización era un criterio para dejar fuera a un candidato.
Un integrante del comité central FA dijo al medio citado que “si el PC lo pone se le dirá que no”.
Desde la directiva, recalcaron que aunque no se ha discutido el tema, resulta lógico que la formalización sea un elemento de exclusión.
Además, un dirigente admitió que “a nadie en el FA le agrada”, mientras que otro recordó que hay “diferencias políticas sustanciales con él” en el tono de unidad.
Aun así, no está todo dicho. Otro dirigente acotó que lo que prima es la relación entre partidos y que el PC ha sido un “aliado correcto” en el Gobierno.