Internacional

Fallo en Starship de SpaceX provoca lluvia de escombros

Editado de agencias y medios internacionales por Cristian Navarro H.

Periodista

Starship
Foto: Publicado en X por @aapayes
Este es el segundo fallo consecutivo de la etapa superior del Starship, un componente clave para los planes de la NASA

Un fallo técnico en el cohete Starship, desarrollado por SpaceX, provocó su desintegración durante el octavo vuelo de prueba del programa, realizado el jueves. Según CBS News, el incidente ocurrió poco más de ocho minutos después del despegue, cuando varios motores de la etapa superior dejaron de funcionar, impidiendo que el vehículo alcanzara la altitud suborbital planificada.

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Este es el segundo fallo consecutivo de la etapa superior del Starship, un componente clave para los planes de la NASA de llevar astronautas de regreso a la Luna en los próximos años. De acuerdo con SpaceX, el cohete experimentó un «desmontaje rápido e imprevisto» durante su ascenso, lo que resultó en la pérdida de contacto con el vehículo.

La compañía informó que está analizando los datos de la prueba para identificar la causa del fallo. “El éxito proviene de lo que aprendemos, y el vuelo de hoy ofrecerá lecciones adicionales para mejorar la fiabilidad de Starship”, señaló SpaceX. Dan Huot, comentarista de lanzamientos de la empresa, enfatizó que estas pruebas son esenciales para el desarrollo del vehículo y aseguró que SpaceX continuará con sus esfuerzos para alcanzar el espacio en el futuro cercano.

 

IMPACTO EN LA SEGURIDAD AÉREA

El incidente no solo afectó las operaciones de SpaceX, sino que también tuvo repercusiones en la seguridad aérea. La Administración Federal de Aviación (FAA) activó un protocolo de emergencia para gestionar el riesgo de caída de escombros, lo que llevó a la suspensión temporal de vuelos en varios aeropuertos de Florida, incluyendo el Aeropuerto Internacional de Miami y el Aeropuerto Internacional de Fort Lauderdale–Hollywood, donde se registraron retrasos de hasta 45 minutos. Los aeropuertos de Palm Beach y Orlando también se vieron afectados.

La FAA estableció un Área de Respuesta a Escombros y redujo la velocidad de las aeronaves en la región para garantizar su seguridad. Aunque las operaciones normales ya se han reanudado, la agencia confirmó que ha iniciado una investigación para determinar las causas del fallo en el Starship.

Usuarios en redes sociales compartieron videos en los que se observaban restos del cohete cayendo en el sur de Florida y el Caribe, lo que subraya la magnitud del incidente.

UN LANZAMIENTO PROMETEDOR QUE TERMINÓ EN FRACASO

El lanzamiento del jueves comenzó según lo programado, tres días después de una cancelación previa debido a problemas técnicos no especificados. A las 18:30 horas del este, SpaceX encendió los 33 motores Raptor de la primera etapa Super Heavy, logrando el despegue desde su sitio de lanzamiento en Boca Chica, Texas.

Este cohete, considerado el más alto y poderoso del mundo, puede generar hasta 7.257 toneladas de empuje, más del doble de la potencia del Saturno 5 de la NASA. Durante los primeros minutos del vuelo, la etapa Super Heavy completó con éxito su tarea de impulsar la etapa superior Starship fuera de la atmósfera inferior y regresó a la plataforma de lanzamiento, donde fue capturada por los brazos mecánicos gigantes conocidos como “palillos chinos”.

Mientras tanto, la etapa superior Starship de 48,7 metros de altura continuó su ascenso con seis motores Raptor, que inicialmente parecían funcionar sin problemas. Sin embargo, poco después de los ocho minutos de vuelo, cuatro de estos motores se apagaron prematuramente. Las imágenes en vivo mostraron que el cohete comenzó a girar antes de que se perdiera el contacto.

No está claro si la desintegración del vehículo fue causada por el sistema de autodestrucción o por las cargas estructurales extremas durante el reingreso a la atmósfera.

HISTORIAL DE FALLOS Y AJUSTES TÉCNICOS

Este incidente se suma al fallo ocurrido en enero durante la séptima prueba de vuelo del Starship. En esa ocasión, un incendio en la primera etapa Super Heavy provocó la activación del sistema de autodestrucción, lo que resultó en la desintegración del cohete y una lluvia de escombros.

Tras ese incidente, SpaceX implementó diversas modificaciones técnicas, como ajustes en las líneas de propulsión, cambios en las temperaturas del combustible y la instalación de ventilaciones adicionales para reducir el riesgo de incendios. A pesar de estas mejoras, el fallo del jueves demuestra que aún quedan desafíos significativos por superar.

STARSHIP Y LOS PLANES LUNARES DE LA NASA

El desarrollo del Starship es clave para los planes de la NASA de regresar a la Luna como parte del programa Artemis. SpaceX tiene un contrato con la agencia espacial para proporcionar una versión modificada del Starship que permita el transporte de astronautas al polo sur lunar.

Este ambicioso proyecto requiere que el Starship sea lanzado a la órbita terrestre, donde será reabastecido por otros cohetes antes de emprender su viaje a la Luna. La NASA planea utilizar el cohete Space Launch System (SLS) para enviar a los astronautas en la cápsula Orion, que se acoplará al Starship en órbita lunar para el descenso a la superficie. Según los planes actuales, el primer aterrizaje tripulado podría realizarse entre 2027 y 2028, después de una misión no tripulada de prueba.

EXPANSIÓN DE SPACEX EN FLORIDA

Mientras enfrenta estos desafíos técnicos, SpaceX avanza en la construcción de nuevas instalaciones en el Centro Espacial Kennedy en Florida. Estas instalaciones, conocidas como “Gigabay”, incluirán un edificio de 115 metros de altura para reacondicionar y procesar los cohetes Super Heavy y Starship.

Con una capacidad de 1,3 millones de metros cúbicos y 75.700 metros cuadrados de espacio de trabajo, se espera que estas instalaciones estén operativas para finales de 2026. Además, SpaceX planea construir una planta de fabricación en Florida similar a la de Boca Chica, Texas. Según un comunicado de la compañía, los propulsores y naves serán transportados desde Texas a Florida en barcazas mientras se completan las nuevas instalaciones. Este enfoque busca aumentar la frecuencia de lanzamientos mediante la rápida reutilización de los vehículos.

A pesar de los contratiempos recientes, SpaceX sigue adelante con su objetivo de perfeccionar el sistema Starship, clave no solo para los planes lunares de la NASA, sino también para revolucionar los viajes espaciales.

 

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