El Papa Francisco falleció este lunes a las 7:35 de la mañana en el Vaticano, según informó el cardenal Kevin Farrell, quien leyó el comunicado oficial. La noticia conmocionó al mundo apenas un día después de que el pontífice hiciera su última aparición pública durante la misa de Pascua, donde pronunció una breve pero significativa bendición “Urbi et Orbi”.
Lea también Guerra comercial: China amenaza a EEUU con «respuestas firmes»
Francisco había salido recientemente de una larga hospitalización por neumonía, y aunque visiblemente debilitado, insistió en dirigir su mensaje final ante miles de fieles congregados en la Plaza de San Pedro.
UN PONTIFICADO QUE TRASCENDIÓ FRONTERAS
Jorge Mario Bergoglio, nacido en Buenos Aires en 1936, fue el primer papa jesuita, el primero en elegir el nombre de Francisco y el primero proveniente del hemisferio sur. Su elección en 2013 marcó una ruptura con la tradición europea de la Iglesia y simbolizó el comienzo de una nueva etapa enfocada en la periferia, los pobres y los excluidos.
Desde su entronización, Francisco se consolidó como una voz influyente en temas que abarcaron desde el cambio climático y las migraciones, hasta la pobreza estructural y la reforma de las instituciones eclesiásticas. A través de encíclicas como Laudato si’ y Fratelli tutti, propuso un programa de humanidad solidaria y una crítica frontal al capitalismo salvaje, la indiferencia global y el poder sin ética.
REFORMADOR Y PASTOR EN TIEMPOS TURBULENTOS
Durante sus 12 años de pontificado, impulsó reformas administrativas en el Vaticano, promovió la descentralización de la Iglesia y fortaleció la representación del mundo no occidental en el Colegio Cardenalicio. Francisco nombró a más del 80% de los cardenales electores, con fuerte presencia de Asia, África y América Latina.
También enfrentó resistencias internas por su enfoque hacia los temas de abusos, su relectura de la moral eclesial y su lenguaje inclusivo. Aun así, mantuvo una línea firme: «La Iglesia no es una ONG», solía repetir, para enfatizar su raíz espiritual por sobre la mera acción social.
UN LÍDER PARA CREYENTES Y NO CREYENTES
Su estilo directo, humilde y empático lo acercó a millones, incluso fuera del ámbito católico. Francisco ejerció una influencia política sutil pero profunda: facilitó el diálogo entre Cuba y Estados Unidos, condenó con fuerza la guerra, abogó por la diplomacia multilateral y criticó tanto el populismo como el liberalismo sin alma.
Para muchos, su figura representó un llamado a una “conversión global”: del egoísmo al bien común, de la indiferencia a la acción compasiva, de la ideología a la humanidad. «No se cansen de construir puentes», exhortó una y otra vez.
UN LEGADO QUE INTERPELA
El Papa Francisco deja un legado de reforma, palabra profética y compasión activa. Aunque nunca visitó oficialmente su país, Argentina, su influencia en la vida política y espiritual de su nación fue constante. El desafío que deja a su pueblo y al mundo es claro: construir sociedades más humanas, reconciliadas y justas.
Mientras se inicia el cónclave para elegir a su sucesor, el eco de su pontificado resonará durante generaciones. Francisco no solo fue el obispo de Roma, sino una de las conciencias morales más potentes de nuestro tiempo.
Este es el momento en el que el Vaticano anuncia oficialmente la muerte del Papa Francisco.
El encargado fue el cardenal Kevin Farrell.pic.twitter.com/kQ3CgDg9cj
— Agustín Antonetti (@agusantonetti) April 21, 2025