En la segunda jornada del juicio contra Sean Combs, la cantante Casandra Ventura, conocida como Cassie, ofreció un estremecedor testimonio que duró más de seis horas. En un tribunal abarrotado de periodistas y público, y ante la atenta mirada del propio Combs, Ventura, embarazada de ocho meses y medio, expuso con lágrimas los abusos físicos, psicológicos y sexuales sufridos durante más de una década de relación con el artista.
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“ME GOLPEABA, ME ARRASTRABA, ME PATEABA LA CABEZA SI ESTABA EN EL SUELO”, RELATÓ.
Así comenzó su declaración, en la que detalló los llamados freak-offs, orgías semanales en las que participaba por temor a represalias y que, según dijo, se convirtieron “prácticamente en su trabajo”.
Durante la audiencia, Ventura fue acompañada por su actual esposo, el entrenador Alex Fine, quien solo se ausentó durante el tramo reservado a la denuncia de violación en 2018. A través de su testimonio, la artista describió una relación marcada por el control absoluto, donde Combs decidía sobre su apariencia, finanzas y entorno, llegando incluso a castigarla con la confiscación de objetos personales y a vigilarla con seguridad privada.
DROGAS, CHANTAJE Y VIOLENCIA
Ventura declaró que Combs organizaba las orgías, elegía a los participantes —principalmente hombres— y les proporcionaba drogas como ketamina, éxtasis y cocaína para someterlos. “Me sentía asquerosa, humillada. No sabía cómo parar”, afirmó, reconociendo que su juventud e ingenuidad la llevaron a normalizar el abuso.
Los encuentros, grabados en video por el propio rapero, servían también como herramienta de chantaje, según declaró. “Conservaba dispositivos rotos porque temía qué material podían contener”, indicó.
RED DE COMPLICIDAD Y AGRESIONES PÚBLICAS
La fiscalía busca demostrar que Combs no actuó solo, sino que contaba con una estructura de asistentes, guardias y colaboradores que facilitaban y encubrían los delitos. Ventura declaró que recibía apoyo financiero de parte del equipo del artista y mantenía comunicación frecuente con sus asistentes personales.
Ventura revivió uno de los momentos más crudos de su testimonio al relatar la paliza que Combs le propinó en marzo de 2016, en un hotel de Los Ángeles, hecho que CNN difundió en un video. Según relató, intentó huir descalza del lugar, pero Combs la alcanzó, golpeó y arrastró por el pasillo. “Me pegó tantas veces que no se pueden contar”, sostuvo.
“NO HABÍA OTRA FORMA”
Las orgías, aseguró, se realizaban en propiedades del artista o en hoteles de lujo bajo nombres falsos. En una ocasión, Combs la obligó a meterse vestida en una piscina llena de aceite de bebé. “Si eso era lo que Sean quería, eso era lo que iba a ocurrir”, dijo. Agregó que ella misma debía reclutar escorts, evaluar su aspecto físico y pagarles en efectivo.
La audiencia continuará este miércoles, con Ventura nuevamente en el estrado. La fiscalía busca demostrar la existencia de una organización criminal liderada por Combs, dedicada a la explotación sexual, violencia y abuso sistemático durante más de dos décadas.
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“Sus ojos se volvían negros antes de golpearme”, declaró Cassie Ventura entre lágrimas en pleno juicio contra Sean “Diddy” Combs.
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— Global Network News 🌎 (@iluminnatii) May 13, 2025
