El presidente de Brasil, Luiz Inácio Lula Da Silva, se reunió este jueves con la ex presidenta argentina Cristina Fernández de Kirchner en su domicilio del barrio porteño de Constitución, donde cumple arresto domiciliario tras su condena en la causa “Vialidad”. La visita, de carácter privado y humanitario, se realizó luego de la participación de Lula en la Cumbre del Mercosur en Buenos Aires.
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El mandatario brasileño arribó al lugar pasadas las 12:30, acompañado por una nutrida escolta policial y funcionarios diplomáticos. Permaneció en la residencia por cerca de 50 minutos. La reunión fue gestionada por la Cancillería argentina y la Embajada de Brasil, y contó con la autorización del juez federal Jorge Gorini, quien autorizó el ingreso con la condición de no generar alteraciones en el entorno vecinal.
UNA VISITA CON FUERTE CONTENIDO POLÍTICO
A través de sus redes sociales, Cristina Kirchner calificó el encuentro como “mucho más que un gesto personal” y lo definió como “un acto político de solidaridad”. En su publicación, destacó las similitudes entre la persecución judicial que enfrentó Lula en Brasil y su propia situación en Argentina, denunciando una “deriva autoritaria” por parte del gobierno de Javier Milei.
“La Argentina vive una auténtica deriva autoritaria, en lo que podemos identificar como terrorismo de Estado de baja intensidad”, escribió la ex mandataria. Criticó además las recientes detenciones de militantes peronistas ordenadas por la ministra de Seguridad, Patricia Bullrich, y apuntó a figuras clave del oficialismo como Karina Milei y Santiago Caputo.
CRÍTICAS AL RUMBO DEL GOBIERNO
Cristina Fernández también cuestionó las políticas económicas del actual gobierno, señalando que “están convirtiendo al país en un experimento continental”, y comparó el actual modelo con el implementado en la dictadura chilena de Pinochet. Acusó a la administración de Milei de vaciar la democracia “desde adentro”, atacar la libertad de prensa y preparar reformas regresivas que profundizarían la desigualdad.
“El propio Caputo ya anunció que, después de octubre, se viene la verdadera motosierra: reforma previsional, reforma laboral y reforma fiscal”, advirtió.
LULA EXPRESÓ APOYO Y CERCANÍA
Minutos después del encuentro, Lula Da Silva también se pronunció en sus redes sociales. “Me alegró mucho volver a verla y encontrarla tan bien, tan fuerte y con ganas de luchar”, escribió. El presidente brasileño destacó su vínculo personal con la ex jefa de Estado argentina y expresó su solidaridad ante la situación judicial que enfrenta.
“Además de expresarle mi solidaridad por todo lo que ha vivido, le deseé toda la fuerza para seguir luchando con la misma determinación que ha caracterizado su trayectoria vital y política”, señaló.
UNA REUNIÓN COORDINADA CON EXTREMA RESERVA
Equipos diplomáticos de Argentina y Brasil organizaron la reunión con estricto sigilo. El encuentro representó una excepción al régimen de visitas restringido que rige sobre la líder peronista, condenada a seis años de prisión e inhabilitación perpetua por administración fraudulenta y actualmente bajo arresto domiciliario.
Mientras se desarrollaba la reunión, decenas de militantes se congregaron frente al edificio para manifestar su apoyo a Cristina Kirchner. La escena contrastó con el tenso saludo que Lula y el presidente Milei protagonizaron horas antes en la Cumbre del Mercosur, donde el brasileño asumió la presidencia pro tempore del bloque hasta finales de 2025.
La visita de Lula marca un hito político y simbólico en el escenario regional, en un contexto de alta polarización en Argentina y crecientes cuestionamientos al rumbo del actual gobierno.
MISERIA PLANIFICADA Y TERRORISMO DE ESTADO DE BAJA INTENSIDAD.
HOY RECIBIMOS AL COMPAÑERO @LulaOficial en mi casa, donde estoy bajo detención domiciliaria por decisión de un Poder Judicial que hace tiempo dejó de disimular su subordinación política y se convirtió en un partido… pic.twitter.com/4WgdyeZdrP
— Cristina Kirchner (@CFKArgentina) July 3, 2025