El caos vivido en el estadio Libertadores de América-Ricardo Enrique Bochini sigue dando que hablar. Después de la suspensión del duelo entre Universidad de Chile e Independiente por la Copa Sudamericana, el club argentino publicó un comunicado oficial donde fijó su postura sobre lo ocurrido.
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El “Rey de Copas” apuntó directamente a la barra del Romántico Viajero como principal responsable de los disturbios que terminaron con decenas de heridos y detenidos. Según el escrito, los hechos violentos se originaron en el sector visitante antes del inicio del partido.
“De acuerdo con las imágenes difundidas, reportes oficiales y partes policiales, los incidentes se iniciaron en el sector visitante desde la previa del partido. En primera instancia, atacaron e inactivaron el sistema cerrado de cámaras de seguridad, y luego procedieron a destruir las instalaciones sanitarias del sector”, indicó el comunicado.
La institución agregó que los hinchas azules utilizaron los escombros como proyectiles y lanzaron pirotecnia hacia socios locales que se encontraban en la tribuna baja. “Seguidamente, la parcialidad visitante utilizó los escombros como proyectiles y lanzó pirotecnia hacia los socios locales que se encontraban en la tribuna baja y en una de las gargantas adyacentes a la tribuna sur”, remarcó.
En cuanto a las agresiones de su propia hinchada, Independiente solo reconoció que “posteriormente, se produjeron agresiones inaceptables por parte de grupos locales”, sin profundizar en su responsabilidad.
¿Y LA POLICÍA?
Respecto a la seguridad, el club negó cualquier incumplimiento: “Desde el primer momento, el Club activó los protocolos de seguridad, coordinó con las autoridades presentes y con la organización del torneo, y dispuso asistencia médica a las personas lesionadas en total cumplimiento del Manual Conmebol”.
Pese a los registros que circularon en redes sociales mostrando fallas en el control, Independiente insistió en que cumplió con las normas y aseguró que seguirá colaborando con la investigación en curso. Además, se puso “a disposición de los heridos y damnificados”.
Mientras tanto, desde la U esperan la resolución de Conmebol y el informe de seguridad. Loyola, gerente deportivo del cuadro azul, había manifestado su preocupación por la falta de garantías antes del viaje, un punto que ahora cobra relevancia tras los hechos de violencia que empañaron la llave.
