La Iglesia Católica chilena confirmó este lunes el fallecimiento de monseñor Alejandro Goic Karmelic, obispo emérito de Rancagua, a los 85 años de edad. El religioso permanecía internado en la Clínica Isamédica de la capital regional desde el pasado viernes 29 de agosto, cuando ingresó de urgencia por complicaciones de salud.
En un comunicado, el Obispado de Rancagua expresó: “Con profundo pesar informamos que hoy, 1 de septiembre, ha partido a la Casa del Padre monseñor Alejandro Goic Karmelic, obispo emérito de Rancagua. Rogamos a toda la comunidad eclesial y a quienes lo conocieron unirse en oración por su descanso eterno y por el consuelo de sus familiares y cercanos. Pronto se entregará más información respecto a sus funerales”.
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UN PASTOR COMPROMETIDO CON LA JUSTICIA SOCIAL
Nacido en Punta Arenas en 1940, Goic fue ordenado sacerdote en 1966 y rápidamente destacó por su cercanía con los sectores más vulnerables. Durante su labor en la Patagonia fue párroco y capellán de la penitenciaría local. En 1978 participó en gestiones diplomáticas de la Iglesia para evitar un conflicto bélico entre Chile y Argentina.
Al año siguiente, el papa Juan Pablo II lo nombró obispo auxiliar de Concepción, cargo en el que profundizó su compromiso social, visitando las minas de Lota y ganándose el apodo de “Obispo rojo” por su sensibilidad con las demandas de los trabajadores.
LIDERAZGO EN LA IGLESIA CHILENA
Goic asumió como obispo de Rancagua en 2004 y se mantuvo en el cargo hasta 2018, cuando el papa Francisco aceptó su renuncia. En su gestión destacó por su rol en la negociación del conflicto de los trabajadores subcontratados de Codelco en 2007 y por impulsar la propuesta de un “sueldo ético”, superior al salario mínimo vigente en la época.
En 2008 actuó como mediador entre el Gobierno y la presa política mapuche Patricia Troncoso, quien realizó una huelga de hambre de 112 días. También fue presidente de la Conferencia Episcopal de Chile y encabezó el Consejo Nacional para la Prevención de Abusos contra Menores.
Con su lema episcopal “Cristo es mi vida”, monseñor Goic dejó una huella marcada por la defensa de los derechos humanos, el compromiso con los trabajadores y la búsqueda de mayor justicia social en Chile.
Monseñor Alejandro Goic Karmelic: Una vida entregada a la Iglesia. El obispo emérito de Rancagua, monseñor Alejandro Goic Karmelic, partió a la Casa del Padre este lunes 1 de septiembre. https://t.co/fvVZZ8gzrr pic.twitter.com/QofUoF9P1J
— Iglesia.cl (@iglesiachile) September 1, 2025
