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¿Qué ver esta Navidad? Recomendaciones de películas según el ánimo

Javiera Sanzana

Periodista

Navidad
Foto: Agencia Uno
Comedias familiares, romances y relatos más emotivos se repiten cada diciembre, convirtiéndose en parte del ritual previo a la Nochebuena.

Con la llegada de la Navidad, las plataformas de streaming y la televisión abierta vuelven a llenarse de clásicos y estrenos ambientados en estas fechas.

Comedias familiares, romances y relatos más emotivos se repiten cada diciembre, convirtiéndose en parte del ritual previo a la Nochebuena.

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Para quienes aún no deciden qué ver, estas son algunas recomendaciones según el ánimo y el momento.

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Para llorar sin culpa

Entre las opciones más emotivas destaca Last Christmas: Otra oportunidad para amar, una historia romántica ambientada en Londres que combina el espíritu navideño con temas como la pérdida, las segundas oportunidades y el amor propio.

Una película que suele sorprender a quienes esperan una comedia liviana y termina convirtiéndose en una experiencia emocional más profunda.

Para reír y desconectarse

Si la idea es ver algo ligero y familiar, Mi pobre angelito continúa siendo una de las favoritas, especialmente para ver en familia.

En la misma línea, El Grinch (2000), protagonizada por Jim Carrey, ofrece humor, exageración y un mensaje clásico sobre el verdadero sentido de la Navidad.

Navidad con un tono distinto

Para quienes prefieren alejarse de lo tradicional, El extraño mundo de Jack mezcla fantasía, música y una estética más oscura, ideal para quienes disfrutan de historias alternativas.

Gremlins, en tanto, combina comedia y caos, mostrando una Navidad que no sale según lo planeado.

Romance navideño sin drama excesivo

The Holiday y Love Actually siguen siendo opciones recurrentes para quienes buscan historias románticas ambientadas en diciembre, con conflictos simples y finales optimistas.

Más allá del género, estas películas se han transformado en parte del imaginario navideño, acompañando reuniones familiares, cenas y momentos de descanso. Al final, no se trata solo de qué ver, sino de compartir —o sobrevivir— la espera de la Navidad.

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