En los cuatro focos simultáneos en el sector de Las Tablas, en el Lago Peñuelas, desde donde se originaron los voraces incendios que asolaron a las comunas de Viña del Mar, Valparaíso, Quilpué y Villa Alemana, personal especializado detectó la presencia de acelerantes.
Así lo informó La Tercera, que citó a “fuentes conocedoras del resultado de las diligencias” que encabeza el fiscal especializado en la materia Osvaldo Ossandón, según las cuales se logró identificar el punto exacto donde comenzaron las llamas.
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Los peritajes habrían arrojado que el fuego se inició y propagó rápidamente a los sectores aledaños porque en la zona se arrojó bencina y parafina.
Con la presencia de los acelerantes toma cada vez más fuerza la hipótesis de que los incendios fueron intencionales.
La Brigada Investigadora de Delitos Contra el Medioambiente y Patrimonio Cultural (Bidema) es la que realiza labores en el lugar.
“ES ALTAMENTE COMPLEJO”
“Si el trabajo pericial y policial establece intencionalidad, se debe indagar quién o quiénes son sus autores. Y en un contexto de devastación propio de la acción del fuego, ello es altamente complejo”, advirtió el coordinador de la macrozona sur de la Unidad de Planificación y Coordinación Estratégica de la Fiscalía Nacional, el exfiscal Cristián Paredes, según el citado medio.
Esto, pues no hay detenidos que se vinculen al inicio de los siniestros.
“También el trabajo en relación a las víctimas es arduo, se debe realizar autopsia a cada una de las personas fallecidas, y en los casos en que no se les puede identificar, se toman muestras de ADN al cuerpo y también a familiares directos para continuar con el proceso de identificación”, comentó Paredes.