A solo cinco días del comienzo del Festival de Viña 2024, Javiera Contador enfrentó un ensayo desafortunado, viéndose obligada a interrumpir su espectáculo debido a las críticas recibidas en Coihueco.
El pasado fin de semana no resultó favorable para dos destacadas figuras del Festival de Viña del Mar. Se informó que Pamela Leiva se presentó en el Festival Longaví Canta, donde tuvo una actuación de aproximadamente 20 minutos, mientras que su colega y actriz Javiera Contador solo pudo permanecer en el escenario durante 13 minutos.
Según reportó La Hora, la comediante apenas pudo permanecer en el escenario por unos diez minutos antes de ser objeto de los primeros abucheos por parte del público hacia sus chistes.
FESTIVAL
Al parecer, la parte de su actuación en la que interpreta a Kenita Larraín superó los límites de lo que la audiencia de Coihueco estaba dispuesta a aceptar. «(…) las pifias comenzaron a sonar en un momento especial de su stand up», mencionó el medio.
Esto ocurrió durante el Festival de Coihueco, un evento en el que no se anticipaban tales acontecimientos. Es relevante mencionar que el personaje interpretado por Javiera Contador en «Casado con Hijos» tiene raíces en esa misma localidad.
Al parecer, la actuación de quien personifica a Kena Larraín traspasó los límites de lo que el público de Coihueco estaba dispuesto a tolerar. Los abucheos comenzaron a escucharse en un momento clave de su presentación de stand up.
Asimismo, se mencionó que la desaprobación se originó por una sección de su rutina que los organizadores habían sugerido eliminar, a lo que la actriz habría hecho caso omiso.
REACCIÓN DE JAVIERA CONTADOR
Después de ese evento, la actriz comentó: «Estuve como 20 minutos, las mujeres se reían mucho y los hombres no tanto, había algunos medios curados esperando la música», declaró en una entrevista con Cooperativa.
«Como nunca me había pasado no lo manejé bien, me puse muy nerviosa y seguro que me puse muy fome porque no quería estar ahí. Fue durísimo, lo pasé super mal», añadió.
En la misma línea, reflexionó: «Es parte de este oficio y hay que aprender a sumarlo como una experiencia”. Sin embargo, también añadió que “quedé llorando y ahí uno empieza a desconfiar del material que tienes».
«Lo que no gustó fue yo, no fue sobre los chistes de orinar. Si hay que cambiar algo para Viña, se cambia. Tampoco pude probar ese material porque me puse súper nerviosa», concluyó.