Camila Gómez, madre de Tomás Ross, enfrenta el último tramo de su caminata desde Chiloé a Santiago y hoy a las 13:00 horas se reunirá en La Moneda con el Presidente Gabriel Boric.
Con el objetivo de entregar una carta al Mandatario, la enfermera de 32 años inició la marcha hace 31 días su viaje. Lo hizo en compañía de Marco Reyes, padre de gemelos con Distrofia Muscular de Duchenne.
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Es la misma enfermedad que tiene su hijo de cinco años y por el cual emprendió la campaña para reunir los tres mil 500 millones que cuesta el único medicamento que podría impedir un deterioro irremediable y profundo de su calidad de vida si se administra antes de que cumpla seis años.
De eso sabe bien Marco Reyes: sus hijos están en silla de ruedas porque no hubo tratamiento oportuno para ellos.
Elevidys es considerado el medicamento más caro del mundo.
«HASTA EL FINAL»
«Soy una mamá y soy enfermera, eso es lo que soy. No tengo ningún color político, somo solo papás y todo es por ellos (sus hijos). Mucha gente puso su fe en nosotros y por eso esto fue transformándose», explicó la madre de Tomás Ross antes de comenzar con el último trayecto de su caminata.
Con su peto amarillo que dice «Si 1 millón de personas dona $3.500 podemos costear el medicamento de Tomás», soportó condiciones climáticas adversas como frío, lluvia y hasta granizo, y además intentos de fraude para tratar de sustraerle el dinero que iba recaudando.
«La meta ya se logró, pero siempre le dije a Marco (Reyes) que lo iba a acompañar hasta el final», recalcó Gómez.
«Ahora Marco caminó por este momento en específico, para representar a todas las familias con distrofia muscular de Duchenne. Vamos a solicitar una mejora en salud en general», agregó.
