A partir de las 17 horas de hoy la Sala de la Cámara de Diputados votará la reforma que en octubre tengamos elecciones en dos días. Y su resultado no deja de ser incierto.
Existe consenso en que es razonable la solicitud que hizo en ese sentido el Servicio Electoral (Servel) ante la proyección del organismo de que las sedes de votación colapsen ante la explosiva mezcla de mucha concurrencia a sufragar debido al voto obligatorio, con muchos y extensos votos (municipales y regionales).
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Solo ariscan la nariz en ese punto republicanos, socialcristianos y algunos independientes.
30 MIL MILLONES MÁS
La duda está frente a otras medidas adicionales, especialmente la de disminuir el aporte fiscal a los candidatos y partidos políticos por su votación: de $1.500 a $970 por cada voto recibido para los candidatos y de $560 a $370 por la devolución adicional que se entrega a los partidos que patrocinan a esos postulantes.
Esto, porque la mayor concurrencia de votantes impactará directamente en las arcas fiscales, con un gasto estimado de $30 mil millones adicionales.
De acuerdo con un análisis de La Tercera, las bancadas de RN, el PC y el PS afrontarán la votación divididas.
La DC se abstendrá, la UDI rechazará; el Frente Amplio, el Partido Republicano y los comités PPD-Independientes y Demócratas-Independientes, la aprobarán, y probablemente también los radicales y otros independientes no alineados; los liberales aún no fijan postura.
También lo apoyarían la bancada PPD-Independientes, al igual que diputados independientes tan variopintos como Johannes Kaiser y Pamela Jiles.
QUORUM ESPECIAL
Para agregarle tensión, la votación requiere el respaldo de 78 legisladores para aprobarse, pues se trata de una Ley Orgánica Constitucional con quórum especial y, por lo tanto, no basta una mayoría simple y circunstancial de diputados presentes en la sala.
De ser aprobada la ley las cosas no quedan ahí. Vuelve al Senado, que ya la rechazó, y si nuevamente o la aprueba tendrá que ira a comisión mixta.
Luego de eso y si finalmente sí se aprueba, el texto pasará al Tribunal Constitucional para su análisis.
Todo muy lejos de la petición del Servel, que solicitó encarecidamente que la determinación de tener elecciones en dos días estuviera resulta a fines de junio.