Alerta en Reino Unido por posibles ataques a centros de refugiados
El Reino Unido se encuentra en estado de alerta ante la posibilidad de ataques a centros de solicitantes de asilo, tras recibir informes sobre potenciales ataques en 30 centros de refugiados y oficinas de abogados de inmigración.
La violencia ha aumentado recientemente, especialmente después del asesinato de tres niñas en un ataque con cuchillo por un joven británico de ascendencia ruandesa.
La difusión errónea de que el atacante era un solicitante de asilo exacerbó las tensiones y contribuyó al aumento de la violencia por parte de grupos de ultraderecha.
Keir Starmer, el primer ministro del Reino Unido, ha reiterado que no tolerará ningún acto de violencia. En respuesta a la creciente violencia, se han desplegado más de 6,000 policías listos para intervenir si es necesario.
Además, algunos bufetes de abogados y centros de apoyo a refugiados han cerrado sus puertas, y se han suspendido servicios médicos en las áreas más vulnerables.
Gobierno llama reunión de emergencia
Starmer convocó una reunión de emergencia para coordinar la respuesta a los disturbios, advirtiendo que los responsables enfrentarán severas penas.
Los ataques más recientes han incluido la violencia en hoteles que alojan a solicitantes de asilo, con reportes de ventanas rotas y fuego provocado cerca de los edificios.
La policía ha tenido que enfrentar no solo las manifestaciones violentas de los grupos de extrema derecha sino también las contramanifestaciones en diversas comunidades.
Desde el inicio de los disturbios, más de 400 personas han sido arrestadas. La violencia se considera el peor brote en 13 años en el país, impulsada por desinformación y xenofobia.
Starmer ha afirmado que las personas que se sientan atacadas debido a su origen deben saber que este grupo violento no representa al país, y que se les llevará ante la justicia.
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