Australia inició la votación anticipada para el plebiscito del reconocimiento de derechos de aborígenes e isleños del Estrecho de Torres el 14 de octubre. La Comisión Electoral Australiana abrió centros de votación en varios estados.
Un total de 17,7 millones de ciudadanos australianos están obligados a votar, enfrentando una multa de 20 dólares australianos si no lo hacen.
Los sondeos favorecen al ‘no’
La pregunta que deben responder en el referendo es: «¿Aprueba usted una ley propuesta para alterar la Constitución y reconocer a las Primeras Naciones mediante la creación de La Voz de los Aborígenes e Isleños del Estrecho de Torres?» Los votantes deben marcar la opción «sí» o «no».
Así, el Gobierno busca establecer un organismo compuesto por miembros elegidos por las comunidades indígenas, conocido como «La Voz». El propósito es brindar asesoría independiente al Ejecutivo y al Parlamento en asuntos relacionados con los pueblos originarios. Esto, con para darles mayor participación en la toma de decisiones.
Aprobado el «sí», esta propuesta formará parte de un nuevo capítulo de tres puntos que se incluirá en la Constitución, la cual data de 1901 y llevará el título de «Reconciliación con los Pueblos Aborígenes e Isleños del Estrecho de Torres». Sin embargo, las encuestas no son alentadoras para la propuesta. Según la encuesta de Essential Poll publicada el pasado 19 de septiembre, la opción del «no» obtendría el 51% de los votos frente al 41% del «sí».
Asimismo, el sondeo de Newspoll publicado el 24 de septiembre concede un 56% al «no» en comparación con un 36% al «sí».
La promesa del primer ministro
El reconocimiento constitucional de los pueblos aborígenes de Australia fue una de las promesas de campaña del primer ministro, Anthony Albanese, durante las elecciones de 2022. Su victoria estuvo impulsada por una sólida agenda climática y social.
«Es hora de que reconozcamos a nuestros pueblos originarios», afirmó el mandatario en una entrevista con la emisora pública ABC.
Los aborígenes, que representan el 3,8% de los más de 26 millones de habitantes de Australia, han sido víctimas de constante maltrato desde la colonización, además de ser desposeídos de sus tierras y discriminados sistemáticamente por las instituciones, organizaciones y la sociedad en general.»
