Aumentan críticas en contra de China por presuntas violaciones a DD.HH
Beijing enfrenta crecientes críticas internacionales debido a presuntas violaciones de derechos humanos. Estas acusaciones incluyen censura de medios, muertes en custodia, desapariciones forzadas y tortura. La situación es especialmente preocupante en la región de Xinjiang.
El gobierno chino ha impuesto restricciones severas a periodistas y medios para controlar la narrativa sobre temas delicados. Además, han surgido evidencias de un patrón sistemático de abusos en el sistema penitenciario y en los campos de internamiento.
Reporteros Sin Fronteras ha documentado la encarcelación de al menos 102 periodistas, muchos de ellos en Xinjiang. Esto resalta la represión dirigida a críticos de las políticas gubernamentales en esa región conflictiva. Además, se han reportado muertes arbitrarias y abusos extremos en detención, afectando a presos políticos, disidentes religiosos y minorías étnicas como los uigures.
La comunidad internacional, incluido el Departamento de Estado de EE.UU., ha señalado la prevalencia de arrestos y detenciones arbitrarias en China. La ONU y otras organizaciones de derechos humanos han instado a China a abolir prácticas como la Vigilancia Residencial en un Lugar Designado (RSDL), criticada por constituir detención arbitraria.
Los críticos también cuestionan la imparcialidad y el debido proceso en el sistema legal chino, donde persiste un sesgo hacia la presunción de culpabilidad, especialmente en casos políticos, y los juicios se llevan a cabo a puerta cerrada bajo la justificación de “secretos de Estado”.
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