En su encuentro en Estados Unidos, el presidente Joe Biden volvió a referirse a su homólogo chino, Xi Jinping, como un «dictador». A pesar de esta etiqueta, destacó los «progresos» logrados durante su primer cara a cara desde la cumbre del G20 en Indonesia en 2022.
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Biden afirmó: «Es un dictador en el sentido de liderar un país comunista con un sistema de gobierno totalmente diferente al nuestro». Sus declaraciones, según la transcripción de la Casa Blanca, surgieron en respuesta a una pregunta sobre si seguiría describiendo a Xi como un «dictador».
La portavoz del Ministerio de Exteriores chino, Mao Ning, respondió rápidamente, expresando la «firme oposición» de Pekín a estas declaraciones «irresponsables», calificándolas como un «intento deliberado de sabotaje y de avivar la discordia entre ambos países».
Esta no es la primera vez que Biden utiliza el término «dictador» para referirse a Xi. Anteriormente, lo hizo tras el incidente del derribo de un globo chino en el espacio aéreo estadounidense, generando críticas desde China. Estas declaraciones se produjeron un día después de la visita del secretario de Estado, Antony Blinken, a Pekín, en un intento de mejorar las tensas relaciones bilaterales.
Tras la reunión de este miércoles, Biden resaltó que fue «la conversación más constructiva y productiva hasta la fecha», elogiando «importantes avances». Xi, por su parte, reafirmó el compromiso de China con una «relación estable, saludable y sostenible» con Estados Unidos, subrayando la necesidad de respetar los principios y las ‘líneas rojas’ de ambas partes.
