Un receso hasta el 1 de julio tendrá el juicio contra el excarabinero Sebastián Zamora, acusado por la Fiscalía Metropolitana Centro Norte de homicidio frustrado en el llamado Caso Pío Nono.
La determinación la tomó el Cuarto Tribunal Oral en lo Penal de Santiago por considerar que este se ha extendido más de lo programado, lo que generó problemas de agenda, tanto del tribunal como de los intervinientes.
Lea también: Arrestan a miembro del Tren de Aragua liberado tras pagar fianza
EL CASO
El caso se remonta a los hechos ocurridos el 2 de octubre de 2020 cuando un adolescente cayó desde el Puente Pío Nono durante manifestaciones del estallido social, presuntamente empujado por el expolicía.
Según la fiscalía, ese día el exuniformado realizó una maniobra para detener a A. A. J. A , de entonces 16 años, impactándolo al borde de la baranda del puente Pío Nono; habría sido a consecuencia de ello que la víctima cayó desde 7,2 metros al lecho del río Mapocho.
El joven terminó con dos sus muñecas fracturadas y contusiones en uno de sus pulmones y cráneo.
La última audiencia de la primera parte del juicio será este viernes 7 de junio para retomarse en julio. La decisión fue consensuada por la fiscalía, los querellantes y la defensa.
UN JUICIO LARGO
Las audiencias de este juicio por el Caso Pío Nono llevan más de un mes.
Desde el miércoles 22 de mayo la fiscalía presentó sus pruebas y se hicieron las exposiciones de los querellantes: el Instituto Nacional de Derechos Humanos (INDH) -que suma a la acusación contra el exfuncionario policial un delito de apremios ilegítimos-, la Defensoría de la Niñez y el diputado Tomás Hirsch.
La fiscal Ximena Chong planteó que el acusado, “pudiendo hacerlo, no desiste de su actuar, desencadenando de este modo la caída de la víctima boca abajo al lecho del río. Fueron solo los socorros oportunos los que evitan la muerte”, sostuvo al inicio la persecutora.
Sebastián Zamora, en tanto, testificó entre lágrimas que «nunca pensé que al ejercer la acción de querer detenerlo, este pudiera caer al río. Yo retrocedí buscando qué hacer, desorientado, en shock; retrocedo y los manifestantes se nos vinieron encima”.
Ahora, de vuelta del receso será el turno de la presentación de la defensa.
La Fiscalía Metropolitana Centro Norte pide para el imputado una pena de ocho años de cárcel.
