El llamado gigante asiático realizará una exhaustiva investigación de la carne de cerdo y sus subproductos que provengan de los países de la Unión Europea como represalia a los aranceles que el bloque comunitario impuso sobre los vehículos eléctricos chinos.
Beijing argumentó que las indagaciones se harían sobre los productos importados que, presumen, se están vendiendo por menos de lo que cuesta producirlos a las empresas nacionales.
Industria porcina
El Ministerio de Comercio de China anunció que dichas pesquisas se centrarán en las importaciones de carne de cerdo destinada al consumo humano como los cortes enteros frescos, fríos y congelados, así como las vísceras del animal.
Una investigación que obedece a peticiones de la Asociación de Ganadería de China realizada el pasado 6 de junio, en una solicitud que busca velar por la industria porcina nacional, según argumentó Beijing.
Investigación en regla
La acción llegaría como una represalia al bloque comunitario de los 27 que el pasado 12 de junio impuso aranceles de hasta el 38,1% a los vehículos eléctricos chinos, una medida que empezará a regir a partir de julio de este año.
Un portavoz de la Comisión Europea dijo que el bloque no estaba preocupado por el lanzamiento de la investigación y dijo a los periodistas que la UE intervendría adecuadamente para garantizar que la investigación cumpliera con todas las reglas relevantes de la Organización Mundial del Comercio.
«No será la primera vez que una investigación anunciada en una jurisdicción sea respondida de la misma manera, por lo que en vista de la investigación de vehículos eléctricos de la UE, esto no es una sorpresa. Los mercados libres y abiertos se basan en prácticas comerciales basadas en normas”, dijo Jens Eskelund, presidente de la Cámara de Comercio de la Unión Europea en China.
