Internacional

Colapso de presa en Sudán causó la muerte de 60 personas

Editado de agencias y medios internacionales por Cristian Navarro H.

El colapso de la presa ha provocado la destrucción de varias aldeas, dificultando el acceso de las autoridades a las zonas afectadas

Colapso de presa en Sudán causó la muerte de 60 personas

Al menos 60 personas han muerto ahogadas y decenas más están desaparecidas después de que la presa de Jor Arbaat, ubicada en el este de Sudán, colapsara, según informó una fuente de la Media Luna Roja Sudanesa.

La presa, con una capacidad de 25 millones de metros cúbicos de agua, se derrumbó tras no haber recibido mantenimiento en los últimos tres años, lo que contribuyó a la tragedia.

Construida en 2003, la presa se encuentra a unos 20 kilómetros de Port Sudán, una localidad estratégica que actualmente sirve como sede temporal del gobierno sudanés, controlado por la cúpula militar desde el inicio del conflicto con las Fuerzas de Apoyo Rápido (FAR) en abril de 2023.

Destrucción de varias aldeas

El colapso de la presa ha provocado la destrucción de varias aldeas, dificultando el acceso de las autoridades a las zonas afectadas para llevar a cabo labores de rescate.

Según Mohamed Adrub, vicepresidente de la Media Luna Roja Sudanesa, la situación es crítica, ya que al menos cinco pueblos, cada uno con una población de 5.000 personas, han sido completamente arrasados por las aguas.

El consejero del gobernador del estado de Mar Rojo, Nayi Ezzeldin, calificó la situación como «catastrófica» y subrayó la necesidad de helicópteros para evacuar a los afectados, algunos de los cuales se han refugiado en montes cercanos donde enfrentan riesgos adicionales, como mordeduras de serpientes y picaduras de escorpiones.

Falta de mantenimiento y fuertes lluvias

El colapso de la presa se atribuye no solo a la falta de mantenimiento, sino también a las fuertes lluvias inusuales que han azotado el país en los últimos días, causando la muerte de al menos 114 personas y afectando a más de 317.000, según las autoridades sudanesas y la ONU.

Estas lluvias han provocado desplazamientos masivos, destruyendo casi 27.000 hogares y dañando otras 31.000 viviendas en más de una decena de estados de Sudán. Además, la situación sanitaria se agrava con la propagación de enfermedades como el cólera, la malaria y problemas oculares, en un país donde el 80% de las instalaciones médicas no están operativas debido a la guerra.

 

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