En los últimos diez días, el país ha registrado alrededor de veinte homicidios, lo que ha generado cuestionamientos sobre las políticas de seguridad del gobierno, especialmente ante la cercanía de las Fiestas Patrias de septiembre.
Desde La Moneda, se han coordinado reuniones para evaluar la estrategia de despliegue policial y la colaboración de diversas instituciones del Estado durante este periodo.
La ministra del Interior, Carolina Tohá, abordó esta situación en el programa Tolerancia Cero de CNN Chile, señalando que muchos de los problemas actuales en materia de seguridad ya existían al inicio del mandato del actual gobierno.
DESCONTROL CRÍTICO
Tohá destacó lo que describió como un «descontrol crítico» en el orden público, con un aumento en la violencia en la Macrozona Sur, una creciente curva de homicidios a nivel nacional, un descontrol sin precedentes en la frontera norte y el aumento de armas, lo que ha propiciado delitos violentos, incluidos homicidios, en diferentes partes del país.
«De esos problemas hay una parte importante que ha tenido una evolución que muestra avances relevantes. O sea, hoy día en la macrozona sur estamos con índices de violencia muy inferiores a los que había hace 3 o 4 años atrás. En el norte del país, los homicidios han dejado de subir, van bajando, después de que tenían una tasa de más del doble del resto del país. El tema fronterizo, que sigue siendo un desafío, ya no va al alza, está cada vez más controlado, y los homicidios en general en el país no han seguido subiendo, que llevaban subiendo desde el año 2016», afirmó.
Además, la ministra señaló que, aunque los homicidios han dejado de aumentar en general, existen ciudades clave donde la reducción no ha sido significativa, y algunos de los asesinatos recientes han causado una gran conmoción.
PRINCIPALES PROBLEMAS
Entre los principales problemas, Tohá mencionó la alta presencia de armas y la situación particular de la Región Metropolitana, donde reconoció la necesidad de un esfuerzo aún mayor en recursos y estrategias. «Requiere un trabajo aún más profundo, más recursos y más elementos», comentó.
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A pesar de la percepción de una crisis de seguridad, Tohá aseguró que la situación no se encuentra en un punto crítico integral, pero reconoció la gravedad del problema relacionado con las armas y ciertos tipos de homicidios.
RENUNCIA Y DESPLIEGUE DE FUERZAS ARMADAS
En cuanto a las críticas de la oposición, que ha pedido su renuncia y la de otros altos funcionarios, Tohá respondió que estas forman parte de la dinámica política, pero enfatizó que lo importante es seguir avanzando en la aprobación de leyes y el aumento de recursos destinados a la seguridad.
Finalmente, sobre la posibilidad de desplegar a las Fuerzas Armadas para apoyar la seguridad, Tohá afirmó que el Gobierno está dispuesto a considerar esta opción, pero subrayó que debe ser parte de una estrategia más amplia.
Asimismo, indicó que cualquier intervención militar en la Región Metropolitana requeriría la declaración de un Estado de Emergencia, una medida que no cuenta con el consenso entre los actores relevantes.
RESPUESTA DE VALLEJO
La mañana de este lunes, la ministra vocera Camila Vallejo reconoció que el país enfrenta una crisis de seguridad, haciendo referencia a la veintena de homicidios ocurridos en la Región Metropolitana la semana pasada. Esta declaración contrasta con la postura de la ministra del Interior, Carolina Tohá, quien aseguró: «No estamos en esa situación, pero tenemos un problema severo con las armas y ciertos tipos de homicidios».
Vallejo, en una entrevista con Radio Duna, afirmó: «Efectivamente estamos ante una crisis de seguridad, que en varios aspectos la hemos podido abordar, y en la región Metropolitana se sigue expresando con un alto nivel de homicidios. Bueno, tiene distintas características en todos los casos, pero la gran mayoría aún tiene relación con enfrentamientos de grupos o riñas».
En relación con los 22 homicidios ocurridos la semana pasada en el Gran Santiago, Vallejo explicó: «En la región metropolitana hemos tenido un especial foco puesto para endurecer y robustecer las estrategias de seguridad. Las estrategias que a nivel nacional hemos desplegado, pensando en las características propias de la región metropolitana, y es porque aquí a diferencia de lo que ha pasado en el país, donde no ha seguido aumentando el homicidio –incluso han ido a la baja, como en la zona norte– en la RM todavía eso no se ha producido».
