El fútbol chileno enfrenta su peor crisis en años y la ANFP llamó a una reunión de emergencia del Consejo de Presidentes.
En las últimas 24 horas, los conflictos internos han alcanzado un nuevo nivel de gravedad. La suspensión de la Supercopa, derivada de las indecisiones de la Delegación Presidencial de Coquimbo, marcó el inicio de un día crítico que se agravó con la rebelión de la Segunda División, poniendo en jaque el acuerdo con el Sifup para deponer el paro de jugadores.
Hasta ahora, solo se había logrado un tímido avance en las negociaciones: eliminar las restricciones de edad en la Segunda División. Sin embargo, este avance quedó en nada tras la declaración de 11 clubes de la categoría, quienes insistieron en mantener el torneo Sub-23 que ya habían votado.
Lea también: Paro de futbolistas: Sifup pide a la ANFP retrasar la Copa Chile
CONVOCATORIA DE EMERGENCIA
Frente al quiebre, la ANFP convocó de urgencia al Consejo de Presidentes este martes a las 18:00 horas. El objetivo es analizar el estancamiento en las negociaciones con el sindicato de futbolistas y buscar una solución al paro que mantiene paralizado al balompié nacional desde hace meses.
El Sifup, por su parte, exige que cualquier acuerdo sea aprobado formalmente por el Consejo de Presidentes antes de levantar la movilización. Además, solicitó suspender el inicio de la Copa Chile hasta que los compromisos estén firmados.
“Es necesario tomar decisiones responsables y no apresuradas, en beneficio de nuestra actividad”, señaló el sindicato en un comunicado.
SEGUNDA DIVISIÓN, EL DETONANTE
El conflicto alcanzó su punto crítico cuando la Segunda División rechazó la flexibilización etaria acordada con el Sifup. En una declaración firmada por 11 clubes, la categoría dejó en claro su postura: el torneo Sub-23 no se toca.
Este rechazo no solo anula el único avance en las negociaciones, sino que también devuelve las conversaciones al punto de partida, complicando aún más la mediación que lidera la Dirección del Trabajo.
UN FUTURO INCIERTO
Con la Supercopa suspendida, la Copa Chile en riesgo de aplazamiento y el paro sin solución a la vista, el fútbol chileno atraviesa una tormenta perfecta.
La ANFP y el Sifup enfrentan el desafío de encontrar un consenso en un escenario donde las divisiones internas parecen insalvables. Mientras tanto, los hinchas y jugadores ven cómo la actividad sigue en pausa, con un futuro cada vez más incierto.
