Universidad de Chile enfrenta un escenario complejo en la antesala de su último partido por la primera rueda del Campeonato Nacional 2025. Este sábado, los azules recibirán a Deportes Iquique con una larga lista de jugadores fuera de acción. A las ya confirmadas ausencias de Maximiliano Guerrero, Franco Calderón y Fabián Hormazábal, se podrían sumar las dudas de Leandro Fernández y Nicolás Fernández.
Si se confirma la ausencia de estos dos últimos, el equipo que dirige Gustavo Álvarez enfrentará uno de sus desafíos más exigentes de la temporada con cinco bajas clave. Un problema que no solo pone en riesgo el resultado inmediato, sino que podría afectar el cierre de una primera rueda en la que la U ha sido protagonista.
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¿CÓMO LLEGA LA U?
El cuadro universitario ha mostrado un rendimiento sólido en líneas generales, manteniéndose en los primeros puestos de la tabla. Sin embargo, el empate ante Curicó y la derrota frente a Coquimbo Unido, además de la expulsión de Maximiliano Guerrero dejaron señales de desgaste.
Junto con eso, las bajas defensivas obligan a Álvarez a improvisar en el fondo. Calderón y Hormazábal han sido habituales titulares, mientras que Leandro Fernández es uno de los generadores de juego más importantes del equipo. Su ausencia limitaría aún más la capacidad ofensiva de la U, que ya ha sufrido en partidos cerrados.
El técnico azul fue honesto: aún no tiene definida la formación para el sábado. La incertidumbre médica y el poco tiempo de recuperación obligan a trabajar con un margen muy reducido.
¿Y CÓMO LLEGA DEPORTES IQUIQUE?
El rival de turno no asoma como una amenaza cómoda. Deportes Iquique es el colista absoluto del torneo, con apenas seis puntos. Viene de perder ante Everton en un duelo clave por la permanencia, en el que mostró corazón, pero no claridad.
Como si fuera poco, esta semana se confirmó la salida de Enric Saborit, uno de los pilares de la defensa, quien rescindió contrato por motivos personales. También fue expulsado César González en el último duelo, lo que debilita aún más al equipo que dirige Miguel Ponce.
En lo futbolístico, Iquique no ha logrado afirmarse. Suma errores defensivos, poca efectividad ofensiva y, aunque mantiene una idea de juego valiente, no ha podido sostener resultados. La presión por puntuar será máxima.
Universidad de Chile tiene una oportunidad clara de cerrar la primera rueda con un triunfo, pero deberá hacerlo sin varias de sus piezas fundamentales. Las bajas en la U de Chile plantean dudas tácticas que podrían darle vida a un Iquique que llega herido, necesitado y sin margen de error. Será un partido entre un equipo disminuido y otro desesperado: los tres puntos pueden marcar el ánimo con que ambos arranquen el segundo semestre.