Paso firme hacia la corona
Pese al duro golpe recibido en la Champions League, el Bayern Múnich mostró que sigue siendo el amo y señor de la Bundesliga. Este sábado, aplastó 4-0 al Heidenheim como visitante por la fecha 30 del torneo y dio un paso más hacia un nuevo título local. La victoria no solo sirvió para reforzar su liderato, sino también para enviar un claro mensaje: este Bayern no perdona.
Desde el arranque, el conjunto dirigido por Vincent Kompany dejó claro que venía a cobrar revancha anímica. El Heidenheim, con una propuesta atrevida y ofensiva, intentó sorprender, pero terminó siendo víctima de su propio atrevimiento. El Bayern lo desarmó con rapidez y eficacia.
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Harry Kane abrió la cuenta a los 13 minutos con un zurdazo desde la frontal, tras una elegante jugada combinada entre Olise y Laimer. El segundo tanto llegó poco después, cuando Konrad Laimer aprovechó un pase filtrado de Gnabry para batir al arquero Müller. La goleada se empezó a gestar con el tercero, cortesía de Kingsley Coman, quien aprovechó un rebote tras un disparo de Guerreiro.
Con el 0-3 al descanso, todo indicaba que la segunda mitad serviría para administrar el resultado. Pero el Bayern tenía más. Joshua Kimmich marcó el cuarto en el 55’ tras una jugada colectiva con Pavlovic y Guerreiro. A partir de allí, el conjunto bávaro bajó las revoluciones y se dedicó a controlar el partido. Incluso su arquero Jonas Urbig tuvo su momento para brillar con una gran atajada ante Conteh.
Con esta goleada del Bayern Múnich, los bávaros alcanzan los 72 puntos y se alejan nueve del Bayer Leverkusen, su inmediato perseguidor, que aún debe jugar su partido de la jornada. El título parece cada vez más cerca.
Más allá de la eliminación europea, el Bayern demuestra que en Alemania sigue reinando con autoridad. La contundencia mostrada ante el Heidenheim es una prueba de que la ambición por el título sigue intacta. Y a falta de cuatro fechas, solo una catástrofe evitaría una nueva vuelta olímpica en Múnich.
