Este sábado 13 y domingo 14 de septiembre Chile recibirá a Luxemburgo por la serie de la Copa Davis, en el Estadio Nacional, rumbo al Mundial; está serie será sin Nicolás Jarry (103 ranking ATP) y Alejandro Tabilo (125), por lo cual Cristián Garín pasará a ser la raqueta número uno del equipo.
El actual 124° ranking ATP asumió el desafío y declaró que está “contento de jugar de local, con este formato es difícil. Sé que va a estar el estadio lleno, mucha gente se ha motivado y eso se valora muchísimo. La expectativa siempre es ganar, sea contra quien sea. Es una serie linda para, después de todos estos años, soñar con el Grupo Mundial», aseveró.
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Garín confesó que desde hace mes y medio arrastra dolores, en particular debido a una fascitis plantar. Esto “no me impide jugar, pero sí me molesta. Hay días que no puedo ni caminar bien. Preocupado, pero he ido mejorando estas dos semanas. No me siento al 100 cien por ciento aún, pero estoy con mucho cuidado y tratamiento», precisó.
También declaró que no esta en su mejor momento: “Soy bien realista, no llego en mi mejor momento, pero por lo menos he ido mejorando”.
Sin embargo, “Davis es distinto a otras competiciones y ya estar aquí me sube el ánimo», agregó.
UN RECUERDO AMARGO
La última vez que Cristián Garín jugó una Copa Davis fue agredido por Zizou Bergs, pero este no fue sancionado.
En cambio, el chileno fue penalizado en no volver a jugar y así Chile perdió la serie de la Copa Davis.
No obstante, dejó atrás ese recuerdo. “Fue algo totalmente injusto, la ITF se desentendió por completo, pero es una etapa cerrada. Esta serie no es una revancha para mí, estoy representando a Chile y lo voy a disfrutar con la gente y mi familia», finalizó.
