La derrota frente a River por 2-1 en el Monumental no fue un simple tropiezo para Boca Juniors. Fue la gota que colmó el vaso para Juan Román Riquelme, quien decidió ponerle fin al ciclo de Fernando Gago. El DT no superó el examen más exigente: su primer Superclásico en el banco xeneize.
Mauricio «Chicho» Serna, integrante del Consejo de Fútbol, fue el encargado de anunciar la noticia. “Hasta acá ha llegado Fernando Gago y su cuerpo técnico con la institución”, dijo tajante. Luego agregó: “No ha sido fácil porque es un hombre de la casa, pero para eso estamos: para tomar decisiones”.
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UNA SALIDA QUE SE VENÍA COCINANDO
Aunque el Superclásico fue el último clavo en el ataúd, la relación entre Gago y la dirigencia ya venía desgastada. La eliminación ante Alianza Lima por Copa Libertadores había dejado a Boca fuera de las competencias continentales en 2025, y la paciencia en el Consejo de Fútbol se terminó de agotar.
En ese encuentro, Gago sorprendió al cambiar al arquero antes de los penales, una jugada que desató internas. La reacción de Marcos Rojo al borde del banco lo dijo todo. Para Riquelme, esa fue una de las señales más claras de que el vestuario ya no respondía.
RIQUELME, SIN FILTRO
Desde el Consejo de Fútbol vieron con malos ojos varias decisiones técnicas. Riquelme no entendió por qué Gago apostó por una línea de cinco defensores ante River, cuando el equipo venía rindiendo con un esquema más ofensivo. “Le cedió el protagonismo al rival de toda la vida”, sentenció una voz cercana al presidente.
Tampoco cayó bien que Alan Velasco, una inversión de 10 millones de dólares, no haya sumado ni un minuto en un partido clave. Para Riquelme, el equipo no solo perdió, sino que lo hizo sin mostrar rebeldía ni ambición. Boca fue tímido, y eso no se perdona.
JUGADORES MOLESTOS
Gago había intentado fortalecer vínculos con el plantel. Organizó un asado en Ezeiza y habló de arrancar fuerte el 2025. Pero en la cancha, los gestos y las decisiones lo expusieron.
Miguel Merentiel no festejó un gol frente a Estudiantes, molesto por su falta de continuidad. Otros jugadores también mostraron descontento. La ausencia de Carlos Palacios tras un accidente en Chile y su exclusión de la lista contra Newell’s descolocó al grupo.
CICLO SIN IDENTIDAD
Pese a algunos triunfos consecutivos que alargaron su estadía, para Riquelme el equipo de Gago nunca logró una identidad clara. “Si en Argentina todos juegan mal, ¿para qué cambiás cuando algo te funciona?”, fue la crítica interna tras la derrota ante River.
El presidente sintió que le había dado a Gago las herramientas para competir en la Libertadores, y que el DT no estuvo a la altura. La falta de evolución, los cambios sin sentido y el desorden táctico terminaron de sellar su salida.
«HEMOS TOMADO UNA DECISIÓN: HASTA ACÁ HA LLEGADO FERNANDO GAGO CON BOCA»
✍🏻 Chicho Serna
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— SportsCenter (@SC_ESPN) April 29, 2025
