En un vuelco total, Independiente pedirá a Conmebol la reanudación del partido frente a Universidad de Chile por los octavos de final de la Copa Sudamericana.
La serie entre Independiente y Universidad de Chile sigue sumando capítulos inesperados. Después de que el encuentro en el estadio Libertadores de América se suspendiera por graves incidentes en las tribunas, la postura del conjunto argentino parecía clara: exigían quedarse con los puntos y avanzar directamente a la siguiente fase.
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Sin embargo, todo cambió en las últimas horas. Según informó el periodista Germán Alcain de TyC Sports, el «Rojo» ahora solicitará la reanudación del partido, completando los minutos que faltaron por disputarse en el segundo tiempo.
“Quieren que esos 40 y pico minutos restantes se jueguen, con la posibilidad de una sanción económica y sin público local”, aseguró Alcain. Esta idea contrasta con lo que declaró hace solo unos días el presidente del club, Néstor Grindetti, quien insistía en que Conmebol debía darle por ganado el encuentro a Independiente.
La decisión se basa en un argumento central: definir la clasificación en la cancha. Para la dirigencia argentina, ese escenario evitaría polémicas mayores y mantendría la imagen deportiva del equipo. Además, consideran que un fallo administrativo podría generar reacciones adversas tanto de los hinchas como del resto de los clubes participantes del certamen.
Por ahora, Conmebol no ha entregado un veredicto oficial. Mientras tanto, la incertidumbre crece entre los fanáticos de ambos equipos, que esperan saber si el cruce tendrá un nuevo capítulo dentro del terreno de juego o si todo quedará en manos del escritorio.
Este vuelco total cambia el panorama de la llave y mantiene en vilo la Copa Sudamericana, que podría ver cómo un partido interrumpido se convierte en el más polémico de la temporada.