El sueño de Joaquín Niemann en el US Open terminó antes de lo esperado. Luego de un mal arranque el jueves, el chileno necesitaba una vuelta sólida para mantenerse en competencia en el tercer major del año. Pero la segunda ronda no ofreció redención. El talagantino firmó una tarjeta de +5 nuevamente, totalizando +10 y quedando eliminado antes del fin de semana.
Las expectativas eran altas. Niemann llegaba como uno de los nombres fuertes del torneo, impulsado por su gran presente en el LIV Golf, donde ha mostrado regularidad y victorias. Sin embargo, el campo de Oakmont, en Texas, se mostró implacable y evidenció una versión errática del chileno que distó mucho del nivel que lo posicionó como favorito.
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COMIENZO ESPERANZADOR, PERO…
El viernes, Niemann inició su recorrido desde el hoyo 10. Allí, tuvo un inicio relativamente estable y hasta prometedor. Su primer birdie llegó en el hoyo 12, el más largo de la jornada con 647 yardas. Aunque cometió un bogey en el hoyo 13, respondió rápidamente con otro birdie en el 14, lo que mantenía viva la esperanza de una remontada.
La primera mitad del recorrido lo cerró sin mayores sobresaltos, manteniendo el par en los siguientes hoyos. Pero todo cambió drásticamente en los últimos nueve hoyos.
La pesadilla comenzó en el hoyo 2, donde firmó un doble bogey que fue el principio del fin. A partir de ahí, su desempeño cayó en picada. Siguió con bogeys en el hoyo 3 y luego encadenó tres más en los hoyos 6, 7 y 8. Ya no había margen de recuperación.
El chileno cerró su participación con una tarjeta total de 150 golpes (+10), ubicándose fuera del top 110, en una de sus peores presentaciones en un campeonato de esta envergadura. En ningún momento estuvo cerca de meterse en la pelea ni de pasar el corte.
UNA DEUDA PENDIENTE
Pese a su protagonismo en el LIV Golf, donde ha conseguido destacadas actuaciones este año, Niemann todavía no logra consolidarse en los torneos major. Hasta ahora, su mejor actuación en este tipo de eventos fue el octavo lugar en el PGA Championship de esta temporada, aunque aún está lejos de pelear por un título grande.
Su próxima oportunidad será en el Abierto Británico, programado entre el 17 y 20 de julio. La clasificación a ese torneo la aseguró gracias a su desempeño en el Tour Europeo el año pasado. Antes, volverá a competir en el LIV Golf, que celebrará su próxima fecha del 27 al 29 de junio en Dallas, donde intentará recuperar confianza y ritmo competitivo.
MIRADA HACIA EL FUTURO
A pesar del traspié en Oakmont, Niemann sigue siendo uno de los principales embajadores del golf latinoamericano y un jugador capaz de marcar diferencias. Lo ocurrido en el US Open servirá como aprendizaje para ajustar detalles, especialmente en campos de altísima exigencia como los que presentan los torneos major.
Con el calendario aún ofreciendo grandes desafíos, Joaco buscará reivindicarse pronto. La temporada continúa y el Abierto Británico aparece en el horizonte como una nueva oportunidad para demostrar que su nivel en el LIV puede también reflejarse en los escenarios más prestigiosos del golf mundial.
