La Asociación Nacional de Fútbol Profesional (ANFP) suma una nueva baja en su ya golpeado equipo directivo. Esta vez, el que presentó su renuncia fue Marko Biskupovic, gerente de selecciones, quien abandonará su cargo a fines de abril para asumir un nuevo desafío en el fútbol europeo.
Según confirmó ADN Deportes, el exfutbolista comunicó su decisión el pasado viernes 11 de abril. Su destino será el Spartak de Moscú, club donde lo espera Francis Cagigao, exdirector deportivo de las selecciones chilenas y actual mandamás del área deportiva del conjunto ruso.
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DEL SCOUTING A LA ROJA
Marko Biskupovic, de 34 años, asumió la gerencia de selecciones en mayo de 2024, en reemplazo de Rodrigo Robles. Su vínculo con Quilín comenzó en 2021, cuando llegó como jefe de scouting tras superar un concurso público organizado precisamente por Cagigao. Su especialidad: identificación de talentos y análisis de rendimiento, herramientas que desarrolló con experiencia previa en el Midtjylland de Dinamarca.
El exUC comenzó su formación mientras aún era jugador activo. Estudió Administración de Empresas en Suecia, cursó Sports Management en el Instituto Johan Cruyff y realizó un Máster en Big Data en Murcia. También sumó cursos en Conmebol y diplomados de gestión deportiva en la Universidad de Palermo.
SU REENCUENTRO CON CAGIGAO
Su salida de la ANFP responde a una oferta directa de Cagigao, quien tras dejar Galatasaray en diciembre, asumió como director deportivo del Spartak en enero. Desde Rusia lo contactó para sumarlo a su equipo, y Biskupovic aceptó.
La noticia genera impacto no solo por la magnitud del cargo, sino porque deja acéfala una estructura clave para La Roja, justo cuando la selección vive un nuevo intento de reconstrucción bajo Ricardo Gareca. De hecho, el ahora exgerente participó en la reciente reunión con el “Tigre”, donde se ratificó su continuidad.
LA ROJA SIN TIMÓN, OTRA VEZ
En menos de un año, la gerencia de selecciones vuelve a quedar vacante, profundizando la sensación de inestabilidad en la ANFP.
Todo esto, en medio de una crisis institucional marcada por la violencia en los estadios, las fricciones con el Gobierno y los apremios organizativos para el Mundial Sub 20 de este año.