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Segunda División cambiaría su formato: Dirigentes buscan recuperar los orígenes

Por Allan Santander

Periodista

segunda división
Foto: Agencia UNO
Dirigentes de la Segunda División proponen una reforma histórica para 2025 que volvería a imponer un límite de edad sub 23. Sin embargo, la medida ha generado controversia y fuertes críticas desde el gremio de futbolistas.

El fútbol chileno está viviendo un nuevo debate sobre cómo debe estructurarse la Segunda División, la categoría que tradicionalmente ha servido como trampolín para jugadores jóvenes y que, en 2025, podría sufrir un giro significativo.

En una asamblea celebrada el pasado viernes, los dirigentes de siete clubes decidieron impulsar una medida que propone regresar a los orígenes de la división, imponiendo un límite de edad para los futbolistas, restringiéndolo a jugadores menores de 23 años, como se estipulaba en sus primeros años de existencia.

La idea busca revitalizar la categoría, tras años de incertidumbre y bajas competitivas, buscando que la Segunda División cumpla su rol de ser una cantera para el fútbol chileno.

Los clubes que votaron a favor de la propuesta fueron Provincial Osorno, Provincial Ovalle, Transandino, Real San Joaquín, Deportes Rengo, General Velázquez y Concón National. Este último, a través de su presidente, Fernando López, fue el principal impulsor de la medida.

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LOS BENEFICIOS QUE DEFIENDEN LOS CLUBES

Para Fernando López, la reforma es una respuesta a los problemas que ha enfrentado el fútbol chileno, particularmente en la Segunda División. Según el presidente de Concón National, la medida busca dar un «nuevo aire» a la categoría, alejándola de las malas prácticas, como los pagos en negro que han marcado escándalos en el pasado. López aseguró que este cambio no afectará la cantidad de futbolistas empleados, pues los clubes seguirán contratando a los mismos jugadores, solo que con una restricción de edad.

«Queremos salir de esta crisis del fútbol chileno, y esta reforma es una oportunidad para que el fútbol juvenil reciba el espacio que necesita para crecer», explicó López. A pesar de que los jugadores sub 23 serían los más beneficiados por esta reforma, el dirigente insistió que el objetivo no es reducir costos, sino potenciar el desarrollo de los futbolistas más jóvenes, dándoles la oportunidad de jugar en una liga profesional.

LA RESPUESTA DEL SIFUP

Sin embargo, la propuesta ha generado una fuerte respuesta del Sindicato de Futbolistas Profesionales (SIFUP). El gremio, defensor de los derechos de los jugadores, no tardó en mostrar su rechazo, señalando que el cambio en las bases de la Segunda División podría tener efectos negativos sobre los futbolistas, especialmente en lo que respecta a la estabilidad laboral y los salarios.

A través de un comunicado oficial, el SIFUP recordó que la creación de la Segunda División nunca fue pensada como un espacio exclusivamente para futbolistas sub 23, sino como una categoría profesional destinada a proteger a los clubes de Primera B de caer al fútbol amateur. El sindicato también criticó la intención de los clubes de competir a «bajo costo», lo que, según ellos, podría vulnerar la normativa de licencia de clubes y poner en peligro la profesionalización del deporte.

«No nos engañemos. Esta reforma no tiene como objetivo potenciar el desarrollo del fútbol chileno, sino reducir costos a costa de los jugadores», advirtió el SIFUP, subrayando que esta propuesta podría afectar principalmente a los futbolistas mayores que quedarían fuera de la competencia.

FUTURO DE LA 2D

Con la propuesta ya en manos del Consejo de Presidentes de la ANFP, la decisión final sobre la reforma de la Segunda División se tomará en los próximos días. Si bien algunos dirigentes confían en que la medida será ratificada, el panorama sigue siendo incierto y la polémica parece lejos de resolverse.

Lo que parece claro es que la Segunda División está ante una encrucijada. La idea de regresar a un límite de edad sub 23 para los jugadores podría traer consigo tanto oportunidades como desafíos. Sin embargo, mientras los clubes buscan una mayor competitividad y estabilidad económica, los futbolistas exigen que se respeten sus derechos y se garantice su bienestar dentro de una categoría profesional.

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