El partido de Boca vs Independiente vivida el 19 de mayo de 2025 en La Bombonera concluyó con un sorpresivo 1‑0 que dejó al Xeneize fuera del Torneo Apertura y convirtió a Carlos Palacios en protagonista de los abucheos más sonoros de la noche.
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EL COMPROMISO
El único tanto llegó a los 64 minutos, cuando Álvaro Angulo cazó un rebote dentro del área y definió con precisión cruzada ante Agustín Marchesín, desatando el festejo visitante.
Hasta ese momento, Boca había contado con la ocasión más clara: un contragolpe que Miguel Merentiel inició y que Carlos Palacios remató desviado cuando el arco estaba a su merced.
El primer tiempo transcurrió equilibrado, con ambos equipos cuidando las líneas y generando pocas situaciones de gol, pero la efectividad de Independiente marcó la diferencia definitiva.
En la segunda mitad, el conjunto dirigido por Julio Vaccari optó por replegarse y castigar al contragolpe, mientras que Boca nunca encontró el ritmo ni la puntería necesaria para vulnerar al guardameta Rodrigo Rey.
AMBIENTE EN LA BOMBONERA
La Bombonera, que suele impulsar al equipo local, mostró una atmósfera tensa y cargada de reproches: cada pérdida de balón fue acompañada por silbidos y cánticos de “Que se vayan todos” dirigidos a la dirigencia.
Al finalizar el partido, el público despidió al plantel con una pifia unánime, reflejo del malestar acumulado tras la eliminación y la derrota en su propio estadio.
CRÍTICAS A CARLOS PALACIOS
Carlos Palacios, ingresado para aportar desequilibrio, fue el principal blanco de las críticas: TyC Sports le otorgó un 1/10 por “ralentizar el juego y errar un gol cantado con el arco vacío”.
Infobae señaló que el remate fallido de Palacios marcó el momento más polémico del encuentro, y que los aficionados lo silbaron y reprocharon en cuanto abandonó el campo.
Tal como reveló el desenlace del partido, concluyó con un resultado que desnuda las carencias ofensivas y la falta de contundencia en momentos decisivos, dejando al descubierto las dudas sobre el rendimiento de Carlos Palacios y la urgencia de un cambio de rumbo en el seno xeneize.
