Un equipo de astrónomos ha anunciado el posible descubrimiento de un fenómeno sin precedentes en el centro de una galaxia ubicada a unos 800 millones de años luz de distancia, se trata de un agujero negro.
Este fenómeno sugiere que un pequeño agujero negro estaría atravesando repetidamente el disco de gas de otro agujero negro más grande, lo que resulta en la liberación periódica de gas en lo que los científicos han denominado «ataques de hipo».
Los investigadores, provenientes del MIT, Italia, la República Checa y otros lugares, observaron que la galaxia repentinamente entró en erupción, emitiendo columnas de gas cada 8,5 días antes de volver a su estado normal y tranquilo.
ATAQUES DE HIPO
Estos «ataques de hipo» periódicos representan un comportamiento completamente nuevo en los agujeros negros y desafían las concepciones anteriores sobre los discos de acreción que los rodean.
Se cree que estos estallidos son causados por la presencia de un segundo agujero negro más pequeño orbitando alrededor del agujero negro supermasivo central y arrojando material del disco de gas del agujero negro más grande.
Estos descubrimientos, publicados en la revista Science Advances, plantean interrogantes sobre la naturaleza de los discos de acreción de los agujeros negros, sugiriendo que podrían contener una variedad de contenidos, incluso otros agujeros negros y estrellas enteras.
ESTUDIO
El autor del estudio, Dheeraj Pasham, científico investigador del Instituto Kavli de Astrofísica e Investigación Espacial del MIT, comentó: «Pensábamos que sabíamos mucho sobre los agujeros negros, pero esto nos dice que hay muchas más cosas que pueden hacer», dice en un comunicado. «Creemos que habrá muchos más sistemas como este y sólo necesitamos obtener más datos para encontrarlos».
Los datos que llevaron a estos descubrimientos provinieron de la detección automatizada realizada por ASAS-SN (All Sky Automated Survey for SuperNovae), una red de 20 telescopios robóticos distribuidos en varios lugares de los hemisferios norte y sur, que examinan automáticamente todo el cielo en busca de signos de supernovas y otros fenómenos transitorios.
