Ecuador se enfrenta a un apagón extendido que ha sumido al país en una grave crisis energética. El presidente Daniel Noboa ha declarado dos días de «suspensión de la jornada laboral» e iniciado investigaciones sobre presuntos «actos inauditos de corrupción y negligencia» en el sector eléctrico.
La situación actual ha generado un debate sobre si la crisis era previsible o si es el resultado de la falta de previsión por parte del gobierno. Diversos medios locales, citando fuentes que se remontan a principios de 2023, señalan que las autoridades no tomaron las medidas adecuadas para prevenir estos problemas energéticos.
En febrero, bajo la «Ley de Emergencia Económica», el gobierno prometió «Cero apagones». Sin embargo, solo un mes después, los cortes de energía regresaron, afectando a varias ciudades con un sistema energético ya deteriorado.
Ante la frustración por los continuos apagones, especialmente en zonas densamente pobladas como Guayas, el presidente Noboa despidió a la ministra de Energía, Andrea Arroba, e inició una investigación sobre posible «sabotaje» en las plantas de energía, sin presentar pruebas concretas. Roberto Luque, previamente ministro de Transporte y Obras Públicas, ha sido nombrado su sucesor.
Sequía, pérdidas energéticas y un sistema deteriorado
La crisis actual se ve agravada por una notable sequía que ha reducido la capacidad operativa de las hidroeléctricas en el país. A esto se suma un aumento significativo en las pérdidas energéticas, de aproximadamente un 10% en 2018 a cerca del 20% actualmente, según Marco Acuña, presidente del Colegio de Ingenieros Eléctricos y Electrónicos de Pichincha.
El gobierno, por su parte, atribuye la imprevisibilidad de la crisis a factores como sabotajes y fenómenos naturales. Sin embargo, esta versión no convence a muchos, quienes exigen respuestas claras y soluciones permanentes.
Mientras tanto, se han tomado medidas para adquirir energía adicional y garantizar el suministro de gas natural, en coordinación con la empresa pública Petroecuador, para enfrentar la crisis.
¿Qué depara el futuro?
La pregunta que queda en el aire es qué depara el futuro energético de Ecuador. El país necesita un plan integral que aborde las causas estructurales de los problemas energéticos y garantice un suministro confiable y sostenible de energía para su población.
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🔴 Nueva contradicción.
“Nadie a mí me va a cuentear en el último segundo que debemos darle 5 horas de apagón a Guayas.
Nosotros no vamos a dar más apagones esta semana. Eso lo hemos tomado como decisión”, aseguró el presidente Daniel Noboa.Hoy, el ministerio de Energía y… pic.twitter.com/tCZ2KD6Jl3
— Mónica Velásquez (@MoniVelasquezV) April 17, 2024
