Un controvertido debate se generó previo al pronunciamiento del Ministerio de Relaciones Exteriores sobre el «triunfo» de Nicolás Maduro en la elecciones presidenciales de Venezuela.
El diputado Diego Schalper (RN) y la diputada Carmen Hertz (PC) tuvieron un fuerte cruce por la red social «X».
En primera instancia, el parlamentario de la oposición manifestó que instó al diputado Vlado Mirosevic (PL) «como Presidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara de Diputados a hacer una declaración. Ante el silencio de la Cancillería, el Congreso debe actuar».
Luego, Schalper informó que Mirosevic «ha tenido intención, pero la diputada Hertz no ha dado acuerdo para hacer declaración con mínimo especial: que se respete la voluntad de los venezolanos y que se transparenten las actas. A exigir que la Cancillería se pronuncie!».
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Frente a ello, y a través de la misma vía, Hertz respondió: «En la Comisión de relaciones exteriores de Cámara de Diputados, la derecha quiere utilizarla para emitir un ‘comunicado’ sobre la ‘situación’ en Venezuela para el show habitual de ese sector, manipulando y esparciendo falacias como siempre,».
«En ese país hay cerca de 1.000 observadores electorales entre ellos las Naciones Unidas, la fundación Carter y el expresidente colombiano Ernesto Samper a quienes supongo no pretenderán calificar de ‘chavistas'», añadió la parlamentaria del PC.
La respuesta de la diputada comunista fue nuevamente contestada por Schalper. «Qué bueno que lo sincere, para que quede de manifiesto que usted y la diputada Erika Ñanco (FA) no estuvieron dispuestas a dar acuerdo para declaración que pidiera respetar resultados electorales que yo pedí. Ni lo más básico de la democracia defienden».
Ante ello, Hertz le respondió «qué ganas de decirle a usted ‘demócrata de última hora’. Cállate Schalper».
Y luego el diputado RN contestó: «Ahora sí le contestaré: anti demócratas como usted están acostumbradas a hacer callar a los que piensan diferente. Pero en Venezuela hoy hablaron para derribar al asesino que usted apoya. Tendrá que respetar en silencio eso, aunque le duela. Y a mí, de democracia, no me da lecciones».
