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Encuesta: El 80% de los chilenos declara aceptar la homosexualidad

Agencia

La encuesta, tiene como antecesor el primer estudio de «Comportamiento Sexual en el Conosur» (Cosecon), que se aplicó en Chile en 1998.

Cómo un «asombroso cambio social» destacó el Ministerio de Salud uno de los principales resultados de la Encuesta Nacional de Salud, Sexualidad y Género (Enssex) 2022-2023, que constató que ocho de cada 10 chilenos aceptan la homosexualidad.

La encuesta, que se aplicó a 20.392 personas mayores de edad a lo largo del país, tiene como antecesor el primer estudio de «Comportamiento Sexual en el Conosur» (Cosecon), que se aplicó en Chile en 1998.

En la comparativa, si en aquella encuesta, de hace 25 años, apenas un 3,4% de la población dijo sentirse muy de acuerdo o de acuerdo con la homosexualidad, la proporción subió al 80,8% en los tiempos actuales.

Aquel es «un indicador asombroso del cambio social que existió del 98 al 22 en términos de la aceptación de la homosexualidad; es un cambio que es realmente notorio, y detrás de eso refleja que hay muchas personas que hoy día siendo de la diversidad sexogenérica van a crecer en un lugar de mayor seguridad emocional y psicológica», valoró la subsecretaria de Salud Pública, Andrea Albagli.

En ese marco, en 1998 sólo el 0,3% de los chilenos declaraba ser homosexual, lesbiana, bisexual u otro; mientras que hoy, según la Enssex, son el 4% de la población.

El estudio fue desarrollado por el Ministerio de Salud, en conjunto con universidades y organizaciones que abordan la temática.

La Corporación Miles, que vela por la autonomía en los derechos sexuales y reproductivos, es una de ellas. Su coordinadora legal, Javiera Mardonas, relevó que la encuesta, «por una parte, nos muestra una sociedad que ha ido aceptando y reconociendo las diversidades, así podemos notar un aumento considerable en la aceptabilidad que ha habido respecto de la homosexualidad y también en la declaración de la orientación sexual disidente por las personas que fueron encuestadas».

«Entonces, este cambio sociocultural es absolutamente relevante para la calidad de vida, para el bienestar general y también para la dignidad de todas las personas en respeto de las disidencias sexo-genérica y también encaminando nuestra sociedad a una más democrática y más respetuosa con los derechos humanos», subrayó.

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