La prensa “Nunca Más” debe caer en conductas impropias. Un llamado a que los medios de comunicación y los periodistas “Nunca Más” caigan en la conducta impropia de la desinformación y ataques a personas como los ocurridos en dictadura y en el periodo previo al Golpe Militar, formuló la Fundación Camilo Henríquez (en formación), que reúne a un grupo de profesionales que buscan difundir los principios planteados por el padre de la prensa chilena.
En una declaración también destacan el esfuerzo que hicieron numerosos periodistas y medios de comunicación de la época, principalmente radios, por llevar la verdad de los hechos a cada uno de los chilenos, pese a la adversidad que vivían.
La nota firmada por los periodistas Ricardo Urzúa Munita, presidente (provisional) y Francisco Larenas Bouquot, es el primer cuestionamiento público que hace algún grupo de periodistas sobre la responsabilidad que les cupo durante ese periodo en la información transmitida, como también un reconocimiento a los profesionales que estuvieron por difundir la verdad de los hechos, como un camino a seguir en el futuro.
Dice la declaración que la Fundación (en formación), “ en el ámbito de sus funciones”, estima necesario dar a conocer su parecer respecto a la conmemoración del 50 aniversario del Golpe Militar ocurrido en Chile el 11 de septiembre de 1973.
La nota expresa:
“El 11 de septiembre de 1973 es una fecha de profundo dolor para toda la familia chilena, especialmente para el periodismo nacional, porque significó un quiebre institucional que implicó miles de muertes, desaparición de personas, enfrentamientos entre hermanos, detención de obreros, campesinos, profesionales, intelectuales, hombres y mujeres, desgarrando el alma nacional” .
Los periodistas no estuvimos ajenos a lo vivido y nos duele profundamente que entre los afectados haya habido numerosos colegas que fallecieron o sufrieron tormentos durante esos años a consecuencia de los actos de violencia. No podemos dejar de recordar los casos de José Carrasco , Carlos Berger y Diana Arón, quien estaba embarazada cuando fue detenida y hecha desaparecer después de ser torturada.
También nos afectó directamente la política de censura que impuso la dictadura, tratando de entregar una versión unilateral de los hechos a la opinión pública.
Nos avergüenza que haya habido medios que apoyaran la campaña de desinformación de la dictadura, y que alguno haya tratado a las víctimas de la represión como “ratas” .
Nos provoca pudor que durante el periodo previo al quiebre, haya habido numerosos medios de comunicación que estuvieron por echar leña al fuego de la crisis que vivía el país, unos más, otros menos, de todos los sectores políticos. Esos medios muchas veces no consideraban al adversario como una persona con opinión diferente, sino como un enemigo al que había que aplastar, con campañas de difamación que incluso llevaron a los homicidios de personajes públicos.
Queremos destacar el valor y el compromiso de innumerables colegas y medios de comunicación que pese a la adversidad se las jugaron por entregar una visión distinta, más cercana a los hechos, aún a riesgos de sus vidas. Son medios de comunicación de Santiago y de regiones, especialmente radios, que transmitían informaciones que contrastaban con las del Gobierno de la época. Casos específicos específicos -y de la mayor importancia – fueron el Mensaje de Navidad de 1973, del Cardenal Raúl Silva Henríquez; la revelación de la existencia de detenidos desaparecidos, en febrero de 1974; el descubrimiento del montaje sobre los 119 desaparecidos, primero la nómina de 24 personas que después fue ampliándose, en virtud de una investigación de Radio Balmaceda, en febrero de 1974; la denuncia del montaje sobre los 119 desaparecidos que había hecho la dictadura en 1975; el hallazgo de los esqueletos en los hornos de Lonquén, publicado en Revista Hoy .
En estas y otras publicaciones fue valiosa la participación de periodistas de esos medios y como también de otros que, si bien no podían publicar los antecedentes, igual participaron de las investigaciones, aportando antecedentes importantes para avanzar hacia la verdad, que al final se impuso.
A los periodistas que constituimos el directorio provisional de la Fundación Camilo Henríquez (en formación) , nos duelen las conductas impropias asumidas por algunos colegas y medios de comunicación, tanto en el periodo previo al Golpe como durante la dictadura pero también queremos hacer un llamado a que “Nunca Más” vuelvan a repetirse estos hechos y, por el contrario, imitar a quienes obedeciendo el llamado de su profesión, supieron buscar las formas para entregar la verdad de los hechos
al pueblo chileno.
Ricardo Urzúa Munita
Periodista
Presidente Provisional.
Francisco Larenas Bouquot
Periodista
Secretario provisional
Santiago, agosto de 2023
